El costo del delito en 2024
Cristian Rodríguez , Director Instituto de Políticas Públicas UCN
La Región de Antofagasta continúa siendo uno de los polos de desarrollo más importantes del norte de Chile, impulsada por su dinámica actividad minera y de servicios. Sin embargo, las cifras consolidadas para 2024 confirman una tendencia en los costos asociados a la delincuencia que se viene observando desde el 2021. Los gastos totales derivados del crimen en el último año superaron los 238,8 millones de dólares, lo que equivale a más de 214 mil millones de pesos (tipo de cambio referencial de $900 por dólar). Estos datos refuerzan la noción de que el llamado "impuesto invisible" que supone la delincuencia afecta de manera transversal a la economía y la sociedad regional.
Al comparar este costo con el Producto Interno Bruto (PIB) estimado para la región en el 2024 -cercano a 34 mil millones de dólares- se desprende que la criminalidad está absorbiendo alrededor del 0,7% del producto regional. Pese a que esta cifra es menor que el promedio latinoamericano (el Banco Interamericano del Desarrollo la sitúa en torno a 3,4% del PIB), supone una merma significativa de recursos que supera la inversión destinada a otras áreas prioritarias como educación, salud o infraestructura.
En el desglose por tipo de delito, los robos con violencia, los hurtos y los homicidios continúan siendo los más onerosos para la región. Según datos basados en el Sistema Táctico de Operación Policial (STOP) de Carabineros- en el 2023 se registraron 11.584 robos con violencia, mientras que en 2024 la cifra cayó a 10.068 (una disminución de 13,1%). Aun así, la factura económica de estos ilícitos sigue siendo elevada, por los costos de reposición y la necesidad de incrementar la seguridad en comercios y empresas.
Respecto a los homicidios, se registraron 44 casos en 2023 y 45 en 2024, incrementando el gasto en investigación policial, procesos judiciales y la pérdida de años de vida productiva de las víctimas. El costo asociado a este delito en la región bordea los 7,5 millones de dólares.
El gasto privado encabeza nuevamente el desembolso total, superando los 116 millones de dólares destinados a vigilancia, guardias, alarmas, seguros y transporte de valores, mientras que el gasto público -conforme la Ley de Presupuesto 2024 y ponderado según la población regional- se aproxima a los 87 millones de dólares. Ello confirma que, pese a iniciativas como Calles Sin Violencia y a la mayor dotación policial, la percepción de inseguridad obliga a reforzar las medidas de protección.
Para las autoridades regionales y el gobierno central, el 2024 se cierra como un año exigente en materia de seguridad. Aunque la coordinación institucional y los incrementos presupuestarios para Carabineros y la PDI han contenido delitos de alta connotación, el panorama general advierte que sin un enfoque integral la tendencia difícilmente se revertirá. En definitiva, reducir la delincuencia es un requisito para el desarrollo económico y el bienestar de Antofagasta.