La comuna de Antofagasta posee un paisaje natural y urbano dañado visualmente, haciéndola poco atractiva a la vista; los sonidos invasivos, tanto en contenido como en decibeles, perjudican la gracia de los sonidos naturales; la falta de aseo la ha vuelto asquerosamente mal oliente; la dañada infraestructura urbana expresada en veredas y pavimentos impiden un desplazamiento confortable; y los espacios como playas y plazas han sido convertidos en mercados donde pululan vendedores gritando y ofreciendo de todo, incluyendo alcohol, limitando el espacio e impidiendo hacer deportes o, simplemente, relajarse.
Esta descripción de la comuna evoluciona desde malas condiciones de vida hasta violencia sistemática, si agregamos el aumento de "locales nocturnos" y la falta de seguridad pública.
El alcalde electo Sacha Razmilic es militante del partido político Evópoli, que declara como bandera ideológica "La Niñez Primero. El 12 de diciembre de 2012 nació Evópoli, inspirado por un sueño: poner a los niños y niñas como primera prioridad nacional", lo que coincide con su cargo de alcalde, puesto que la Ley Nº 18.695 de Municipalidades establece que estas instituciones podrán desarrollar, directamente o con otros órganos de la Administración del Estado, funciones relacionadas con "la promoción de los derechos de los niños, niñas y adolescentes, la prevención de vulneraciones de derechos y la protección general de los mismos".
Como dato, tanto Evópoli como la candidata a Gobernadora, la doctora Marcela Hernando en condición de diputada por Antofagasta en aquel entonces ,suscribieron el Acuerdo Nacional por la Infancia convocado por el Presidente Sebastián Piñera, mostrando que es posible llegar a acuerdo en asuntos de interés común.
Sin entrar a evaluar si tal acuerdo pudo implementarse de manera óptima en la práctica, lo que merece una profunda discusión y un juicio de valor a los poderes políticos, quiero destacar la iniciativa del Presidente Piñera quien, en marzo del 2018, hizo, él, personalmente un llamado a todos los sectores políticos a alcanzar un acuerdo nacional para mejorar la calidad de vida de los niños, niñas y adolescentes en el país, iniciativa que fue valorada por la Unicef, Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia.
Los convenios y alianzas entre entidades públicas como Gobierno Regional y Municipalidad son instrumentos de gestión que manifiestan expresamente una voluntad política decidida a abordar de manera colaborativa y planificada un determinado asunto. Importante será que tanto cores y concejales sean capaces de llegar a acuerdo sobre infancia.
Además, los convenios, alianzas y acuerdos constituyen un instrumento de participación, ya que también pueden confluir asociaciones y agrupaciones representativas de intereses grupales, promoviendo la inclusión en la toma de decisiones. Abordar los problemas de la infancia y adolescencia en Antofagasta necesita desvestirse del miedo a la crítica del político que cuestionará desde la vereda del resentimiento.
Esto es más que voluntad, es demostrar coraje, como decimos en Chile "hacer de tripas corazón". Se debe ser capaz de cruzar a la vereda opositora con diplomacia y verdad, reconocer en el otro/otra sus facultades y experiencia para hacer realidad esa bandera en Antofagasta, mejorar las condiciones de vida con enfoque en las personas poniendo a #LosNiñosPrimero, como dice el slogan de Evópoli.