Dalcio no se va: directiva respalda proceso de Giovagnoli y mantendrán al entrenador
DECISIÓN. El DT dirigió las dos prácticas después de la derrota ante Ñublense y tuvo una reunión con la plana mayor del club donde determinaron cerrar la temporada trabajando juntos. Su continuidad no estará supeditada a resultados.
Si de utilizar un lugar común se trata, la directiva de Cobreloa tomó esta semana una importante decisión y determinó "morir con las botas puestas". Y la decisión parece lógica y hasta cuerda, principalmente apoyada en los criterios que la regencia loína recibió desde el mismo plantel y desde fuera, tanto desde el lado de jugadores históricos y también cierta presión mediática que pidió estabilidad en tiempos de dudas.
Lo extraño y hasta innecesario fue la conducta desde el mismo mando de la institución, que hace una semana estaba llamando al entorno de otros entrenadores y asumía una evaluación a seis partidos del final del campeonato. Una presión innecesaria que se le notó al equipo en su choque con los "Diablos Rojos", donde la ansiedad por ganar o sufrir un terremoto interno afectó al desempeño naranja en el Zorros del Desierto a mitad de semana.
No hubo versiones oficiales pero sí hubo una reunión entre las partes. Y allí ponderó la postura del adiestrador argentino, quien reconoció sus ganas de seguir al mando del equipo, argumentando que ve respuestas en sus jugadores y no ha perdido la capacidad de influenciar al grupo.
Mientras, por el lado del directorio, las posibilidades económicas de tener que indemnizar a un cuerpo técnico y convencer a un reemplazante para dirigir sólo cuatro partidos -el de Viña del Mar ante Everton este sábado estaba fuera de las posibilidades- resulta una decisión apresurada y equivocada. El ejemplo lo tienen en Copiapó que prácticamente resignó sus posibilidades de quedarse en la categoría al mover a Ivo Basay y contratar a Hernán Caputto, entrenador que perdió sus dos partidos, no ha logrado darle la vuelta a la situación y marcó con su llegada la caída de rendimiento en su plantilla.
No se mueve
Giovagnoli trabajará tranquilo, pensando en que desde el club decidieron asumir la apuesta de traerlo para salvar la mala campaña.
El adiestrador cuenta con el apoyo de los jugadores y ante Everton tendrá la oportunidad de mostrar otra cara. Es más, en las últimas dos prácticas se vio entusiasmo y cierta convicción, si es que se considera que en cancha se paró el mismo equipo que jugó ante Ñublense.
El propio santafesino comentó tras la última derrota que "nosotros como cuerpo técnico no queremos ser una traba para lo que venga porque no hay una pretensión económica. Lo nuestro es un desafío deportivo que asumimos y la relación que existe es mancomunada pensando en cambiar la realidad".
Pese a los trascendidos en grupos partidarios durante el día, Dalcio Giovagnoli se mantuvo firme y partió las reuniones con el ente administrador del club reconociéndole al directorio que no pretendía renunciar, eso después de reunirse junto a su staff y decidir que querían dar vuelta la situación en la tabla, apostando por la permanencia.
La novedad respecto de semanas anteriores es que esta vez, independiente del resultado de este fin de semana, el cuerpo técnico tendrá la tranquilidad de saber que dirigirán ante Deportes Copiapó, Deportes Iquique, Universidad Católica y O'Higgins, dos de esos en Calama.
Una de las opciones que pesó a la hora de decidir la continuidad fue la del referente del plantel, Cristian Insaurralde, quien indicó que "hacer cambios a esta altura del año no se vería bien pero no depende de nosotros, los jugadores. Hay una responsabilidad de los que entremos a la cancha también y es difícil pensar en que alguien quiera venir a hacerse cargo de este fierro caliente a tan poco del final de año".