Expertos llaman a estar alerta a los síntomas de la depresión estacional
SALUD. La llegada de la primavera no siempre es motivo de alegría. Aunque se asocia con flores, días más largos, muchas personas experimentan un desanimo que puede afectar a su bienestar emocional.
La depresión estacional es más común en los meses de otoño e invierno, pero algunas personas también la viven en primavera. Aunque esta estación suele asociarse con energías renovadas y alegría, el cambio de estación puede desencadenar síntomas depresivos en ciertos casos.
En este sentido, el psicólogo y director de Pranavida, Jorge Fuentes explica que la depresión estacional de primavera puede ser igual de intensa que la de invierno. "A pesar del aumento de la luz solar, algunas personas se sienten abrumadas por las expectativas sociales de ser felices y productivas en esta época del año".
Pero ¿qué causa la depresión estacional de primavera? A diferencia de la depresión invernal, que está relacionada con la falta de luz, la depresión de primavera podría estar vinculada a un aumento en la temperatura, cambios en el sueño debido a los días más largos, y una presión social implícita por sentirse bien.
"Las expectativas de mejora en el ánimo, simplemente por el cambio de estación, pueden generar una sensación de fracaso y aislamiento en quienes no lo experimentan de esa forma", comenta el experto.
Síntomas comunes
En este sentido, Fuentes detalla una serie de síntomas que es importante tener en cuenta para poder determinar si estamos padeciendo nosotros o algún ser querido, este tipo de depresión estacional y poder tomar las medidas adecuadas.
De acuerdo a lo que comenta el profesional, los síntomas de la depresión estacional de primavera pueden incluir: tristeza persistente o irritabilidad, fatiga o falta de energía.
También problemas para dormir como insomnio o dificultad para conciliar el sueño, ansiedad y problemas de concentración.
En este sentido, para Fuentes "es importante no minimizar estos síntomas solo porque el entorno parece positivo. Las personas que experimentan este tipo de depresión deben buscar apoyo profesional y no sentir culpa por sus emociones", explicó el psicólogo.
En el caso de Chile, esta depresión también puede gatillarse tras las Fiestas Patrias, que este año fueron más largas. Sin embargo, después de estos días de intensa actividad, no es raro que algunas personas experimenten una sensación de vacío o tristeza, un fenómeno conocido como depresión post-fiestas, que se agrava cuando se ha consumido alcohol en exceso.
Al respecto, la psicóloga Teresa Valle explica que este tipo de depresión puede deberse a la caída en los niveles de dopamina, un neurotransmisor que se eleva con la interacción social y las actividades placenteras.
"Una vez que terminan las festividades y volvemos a la rutina, la disminución de estos niveles puede generar sentimientos de desánimo, fatiga o incluso ansiedad", explica la también profesional del Grupo Cetep.
A esto se suman los efectos negativos del alcohol, que no solo impactan el bienestar físico, sino que también pueden intensificar emociones negativas. Valle, advierte que "el consumo excesivo de alcohol en Fiestas Patrias es común y, aunque es una parte socialmente aceptada de la celebración, tiene consecuencias significativas en la salud mental y física".
Adultos mayores
La depresión estacional afecta a los adultos mayores, para muchos de ellos este cambio de estación puede venir acompañado de un profundo malestar emocional.
Agnieszka Bozanic Leal, académica investigadora de la Escuela de Psicología UNAB Sede Viña del Mar, explica que la llamada depresión primaveral "es una realidad compleja y subestimada que afecta también a este grupo poblacional, ya vulnerado por el viejismo. Este concepto, que abarca el conjunto de estereotipos, prejuicios y discriminación hacia las personas mayores, se manifiesta de múltiples formas y refuerza creencias perjudiciales, como la idea de que todas las personas mayores son depresivas, perpetuando así problemas que podrían ser prevenidos o tratados adecuadamente".
Según un estudio del Ministerio de Salud de Chile, la prevalencia de depresión en personas mayores de 60 años es del 15% al 20%, lo que significa que aproximadamente una de cada cinco personas mayores en el país, podría estar enfrentando síntomas depresivos.
"Las familias deben estar alerta ante signos como la tristeza persistente, la irritabilidad, o el desinterés por actividades que antes eran placenteras. Cambios repentinos en el comportamiento, como el aislamiento o el rechazo a participar en reuniones familiares, pueden ser indicadores clave de un problema subyacente", señala la académica.
Explica que "otras señales de alerta incluyen alteraciones en el sueño (insomnio o dormir en exceso) y cambios significativos en el apetito, ya sea pérdida o aumento de peso sin una causa aparente. Además, las quejas recurrentes sobre dolores físicos, como dolores de cabeza, fatiga o problemas digestivos sin una causa médica clara, pueden ser síntomas de un malestar emocional subyacente".
Según las cifras del Departamento de Estadísticas e Informaciones de Salud (DEIS), los diagnósticos de cuadros depresivos graves aumentaron en un 104% durante los años de pandemia, mientras que la depresión moderada aumentó en un 29%.
"Las personas que experimentan este tipo de depresión deben buscar apoyo profesional y no sentir culpa por sus emociones".
Jorge Fuentes, Psicólogo Pranavida
¿Cómo enfrentar esta depresión?
Para manejar esta condición, Jorge Fuentes recomienda una combinación de técnicas:
1. Rutinas de sueño: "Mantener horarios consistentes para acostarse y despertarse puede ayudar a regular el ritmo circadiano".
2. Hacer ejercicio: "La actividad física regular, especialmente al aire libre, puede mejorar el estado de ánimo y reducir los niveles de ansiedad".
3. Buscar apoyo profesional: "En caso de sentir que los sentimientos se prolongan, no hay que dudar en acudir a un psicólogo para recibir orientación y apoyo".
*4141 es la línea de prevención del suicidio, gratuita y a la que se puede llamar desde celulares de lunes a domingo, las 24 horas.