Tenemos la marcada tendencia a mirar con gran atención y pesimismo los problemas y las derrotas que nos aquejan. Esto, a diferencia de los éxitos para los que reservamos generalmente una actitud sin mayor pasión, escasa memoria histórica y con un entusiasmo extremadamente medido. Salvo contadas excepciones.
Sólo hace unas semanas, el Ministerio de Salud informó el enorme impacto que está generando la aplicación del medicamento monoclonal contra el Virus Respiratorio Sincicial (VRS).
Se trata de un anticuerpo que se caracteriza por su inmunidad pasiva. Esto significa que los recién nacidos y los menores de 6 meses que reciben la dosis, adquieren inmediatamente la inmunidad y defensa que les protege ante el citado agente patógeno.
Los datos indican que este año la hospitalización de los menores de 12 meses, se ha reducido drásticamente en más de un 84% en el Hospital Regional de Antofagasta, lo que representa un triunfo gigantesco respecto de una patología que no hace mucho llenaba los titulares de los medios de comunicación con el colapso de camas críticas pediátricas y la muerte niños afectados por el agente viral.
Tampoco escuchamos este año sobre saturación de los servicios de urgencia de la red asistencial, tan tristemente característicos en época invernal. Se trata de una política del Ministerio de Salud, impulsada durante la presente administración y que ha redundado con innegables y positivos resultados, convirtiéndose Chile, en el primer país en Latinoamérica en proteger a los recién nacidos y lactantes a través del referido anticuerpo.
En la Región de Antofagasta, 2 mil 739 lactantes ya recibieron el medicamento, lo que representa una cobertura del 83,3%. A nivel nacional -en tanto- la cifra supera los 132 mil con una cobertura del 90%.
No obstante estos positivos resultados, los desafíos en el corto plazo y en materia de inmunidad se mantienen. Las últimas cifras oficiales de la Campaña de Vacunación contra la Influenza indican que la cobertura regional llega al 84,36% -superando por primera vez al promedio nacional que alcanza a un 84,12%-, restando un total de 2 mil 30 dosis para lograr la meta del 85% y con ello, la inmunidad de rebaño. La Influenza conserva absoluta vigencia, considerando la circulación que tiene el agente viral y que aún restan varias semanas para el término de invierno, existiendo posibilidades que los primeros días de verano se presenten complejos desde el punto de vista epidemiológico.
Hoy, ad portas de Fiestas Patrias, nos enfrentamos al tradicional desafío de evitar las enfermedades gastrointestinales: la Seremi de Salud mediante sus acciones de educación y fiscalización, y la ciudadanía a través de una actitud preventiva como comprar productos sólo en los lugares autorizados, manteniendo la correcta conservación y manipulación de los alimentos. Todo ello, para que una vez más cumplamos la meta de lograr un "18" libre de brotes de enfermedades transmitidas por alimentos. Un logro de todos que se ha mantenido en el tiempo y que también debemos valorar.