Ricardo Pinto Neira ricardo.pinto@mercuriocalama.cl

Llegó a Calama el jueves pasado y tuvo que asumir para el partido en Copiapó donde el equipo volvió a ser goleado. Por eso, mucho se especuló sobre la situación del entrenador interino Nelson Soto y su posible continuidad al mando del plantel para el duelo con Deportes Iquique, una que fue confirmada al entrenador por parte del Gestor Deportivo naranja, Jorge de Olivera.

"Me vine con una mochila y porque me pidieron que viniera a ayudar. Pero ya me confirmaron que me quedo por los próximos tres partidos y en estos días ya he podido trabajar más con el grupo como para poder decir que he visto respuesta desde lo físico lo futbolístico y lo mental", reconoce el jefe de la filial minera en Santiago.

Seguirá junto a Pablo Abdala en un interinato que debería extenderse por los duelos ante "los Dragones", Universidad Católica en Santiago y O'Higgins en Calama. Y deja claro que no mira más allá.

"Nuestra labor es la de encabezar al equipo por estos tres partidos y después se verá. Yo vine a ayudar sólo por estos tres partidos pero sin duda que el fútbol se mira por los resultados y en caso de que se vea un alza y al club le parezca que nosotros podemos seguir más tiempo, hay disponibilidad de mi parte y son temas que tendremos que conversar entre quienes estamos hoy en el cuerpo técnico. Pero sin duda que es algo a lo que a cualquiera le gustaría llegar y en ningún caso nos cerramos a que nos vaya bien y el presente nuestro cambie", asegura.

Soto, quien ya dirigió a los "Zorros" en 2020 después de la salida de Marco Antonio Figueroa por un par de partidos y terminó quedándose por todo el resto de la temporada es hombre del club y como tal, hace los diagnósticos correctos, como los hizo después de la derrota en Copiapó.

Sobre lo mismo y ante aseveraciones de medios partidarios capitalinos donde se aseguró que Jorge de Olivera no había quedado feliz con sus dichos tras esa jornada, afirma que "lo desmiento, tengo conversaciones todos los días con él y jamás hubo un reto o expresión de molestia por dichos que por lo demás es lo que ve todo el mundo y no es antojadizo. Además, yo soy un tipo mayor, con muchos años en el fútbol como para que me anden llamando la atención por decir cosas que no tienen otro fin que el de ayudar y encontrar las respuestas al mal momento que estábamos teniendo como equipo".

Por eso mismo, profundiza sobre esas falencias que encontró en el grupo de jugadores e incluso hace su primera autocrítica. "Yo plantee jugar contra Copiapó en base a ser un equipo corto con mucha intensidad y después en el partido me di cuenta que muchas veces marcábamos a distancia y con la vista no se marca. Entonces, ese fue error mío al plantear una forma de jugar sin preguntarle a los jugadores si iban a estar en condiciones de asumir esa propuesta".

Incluso se dio tiempo para hablar de la crisis institucional marcada por el Caso Cadetes que tiene hoy a Cobreloa en boca de todos pero por temas extrafutbolísticos. "Es un tema muy delicado y como mucha gente, prefiero esperar que sean los organismos oficiales como en este caso es la justicia para que se pronuncie por todo eso que está pasando. Yo soy padre de familia y sin duda que espero que acá exista protección de una eventual víctima pero no voy a hacer juicio de nada porque no me corresponde. Sobre si el hecho golpea o no al equipo, mi trabajo es el de separar los temas y al respecto soy muy claro en que mi responsabilidad pasa porque el futbolista se dedique a jugar y a concentrarse en su actividad sin dejar que lo externo le pueda afectar en su rendimiento".

Cambios

En la tradicional conferencia de prensa antes de los partidos, el estratego adelantó que "ya tengo cerca del 80% del equipo prácticamente decidido y el otro 20% va por ver algunos nombres que hemos ido probando, como el de una alternativa sub 20 -sería el volante Nicolás Aguilar- que probamos y respondió muy bien. Eso lo iremos definiendo en las últimas horas antes del partido con Iquique".

Y dentro de ese sistema de juego que prepara con acento en el trabajo de mediocampo, el DT salió a defender las críticas que existen sobre el trabajo de Nicolás Avellaneda, a quienes algunos apuntan por ser el portero al que le ha tocado recibir varias goleadas.

"Hay que reconocer que el trabajo de Nico ha sido importante en los partidos incluso para evitar varios goles más. No tengo dudas sobre ese puesto, él nos da garantías de que es una prenda de garantía y lamentablemente le ha tocado un momento del equipo en que nos hemos visto frágiles y nos hacen muchos goles. Pero hoy, su titularidad es indiscutida por el nivel que tiene" cerró.

La buena noticia en medio de tantas bajas para armar el equipo que saltará a la cancha del Zorros del Desierto mañana es el retorno del goleador del equipo Bairon Monroy, quien superó las evaluaciones tras varias semanas fuera por un desgarro muscular y está en condiciones de comandar el ataque minero.

Será uno de los que esté disponible en un abanico de alternativas ofensivas que disminuyó ante la confirmación de tres bajas sensibles para el próximo partido.

El delantero uruguayo Gastón Rodríguez definitivamente se pierde el resto de la primera rueda por una pubalgia que arrastra hace semanas y otro de los artilleros de la plantilla, el argentino Marco Borgnino tampoco volverá a jugar hasta la segunda parte del año porque su desgarro no ha cicatrizado y tendrá entre tres y cuatro semanas más fuera de las canchas.

Lamentablemente, otro que queda fuera de la citación es el extremo Juan Carlos Soto también volvió a resentirse en su proceso de vuelta a las canchas que lo tuvo un año alejado del primer equipo y no está disponible para el juego con los iquiqueños.