Compromisos de la educación en 2024
Este año junto con superar las metas en asistencia y entrega de contenidos, se deberán solucionar todos los inconvenientes para asegurar la correcta puesta en marcha de los servicios locales. Sabida la realidad se lamenta que no se avance en los tiempos que fueron definidos para este cambio, como ocurrió con el SLEP Licancabur
Los tristes episodios que aún vive el sistema educacional en la Región de Atacama, nos llevan a pensar que este año las autoridades regionales del ramo tienen las tareas propias del período lectivo, que de por sí es demandante, a las que deberán sumar todos los aspectos necesarios para que la puesta en marcha de los Servicios Locales de Educación (SLEP) se realicen con éxito y así evitar los traumas que aquejan a Atacama.
El desafío no es menor. De hecho el SLEP Licancabur (El Loa, Tocopilla y María Elena), debería estar en operaciones, sin embargo, una revisión de su estado determinó que aún restan aspectos importantes que deben solucionarse y por ello su vigencia fue postergada para 2025, junto con el de Antofagasta.
Ese solo hecho es una mala señal, porque tiempo hubo para hacer una buena gestión preparatoria y no se logró, situación que abre las puertas a la posibilidad de una postergación para Antofagasta por razones similares.
Estas situaciones son negativas y difícil de comprender, más aún cuando el diagnóstico de la educación en la región es conocido. Sabida la realidad se lamenta que no se avance en los tiempos que fueron definidos para este cambio, que en su génesis estableció que apuntaba a mejorar la educación pública.
Obviamente el rol principal le corresponde a las autoridades de los SLEP. Son ellos los llamados a requerir la información necesaria y analizar las soluciones respectivas, especialmente en el tema de infraestructura que hasta hoy es el principal problema. Sin olvidar que la planta docente no puede resentirse más de lo que hoy conocemos.
Todo ello se deberá hacer en paralelo al cumplimiento de las metas programáticas, disminuir la deserción escolar y alzar los niveles de asistencia.
Lo dificultoso e que no se puede postergar ninguna de ellas, porque todas son prioritarias.