Aislados en un futuro apocalíptico, Mónica Carrasco y Jorge Gajardo protagonizan "Análogos"
CINE. Cinta de Jorgue Olguín se estrenará a fin de mes. "Los Venegas" cuentan cómo fue interpretar a un matrimonio que se cuida en la demencia hasta el final.
Recordados por la longeva serie televisiva "Los Venegas", Mónica Carrasco y Jorge Garrido estrenarán el 25 de enero estrena en salas nacionales la última película del cineasta Jorge Olguín, que tiene al matrimonio de actores como sus protagonistas. Esta vez son Blanca y José, los habitantes de una vieja casa que pasan sus días ajenos a la vertiginosa época que les toca vivir, un tiempo violento amenazado por el paso de un cometa verde.
La película, que dura 82 minutos y fue filmada en 4K, obtuvo el premio del jurado en el Festival de Cine Fantástico de Galicia, donde fue calificada como "un drama intenso y fuertemente interpretado, desesperado y lleno de amor". A la pareja protagónica se une la actriz Cindy Díaz, que interpreta a una joven inmigrante que trabaja en el almacén del barrio y que hace recordar a Blanca, que padece Alzheimer, a una hija perdida trágicamente.
Olguín cuenta que esta cinta, junto a su anterior película, "La casa", son ficciones desarrolladas desde el encierro, con pocos personajes y filmadas prácticamente en una sola locación, en este caso una evocadora casa del barrio Matta, en el centro de Santiago. "Decidimos crear esta película con una atmósfera sobrenatural, tiene elementos de ciencia ficción, se está acercando a la atmósfera un cometa que empieza a crear un caos social", cuenta el realizador, quien siempre tuve en mente al matrimonio de actores cuando escribió el guion. "Ellos son icónicos, nos acompañaron durante mucho tiempo con "Los Venegas" y me pareció interesante tenerlos, así que patudamente se lo pedí y les encantó la invitación cuando leyeron el guión", aclara.
Mónica cuenta que con Olguín se conocían de los pasillos de Chile Films, donde el realizador tenía oficinas y ellos rodaban la serie "Los Venegas". Dice que conocen su trabajo y que fue una experiencia muy bonita y emotiva encarnar a este matrimonio en el ocaso, donde ella padece demencia y él la acompaña incondicionalmente.
-¿Cómo fue ponerse en la piel de una mujer que está entrando en el Alzheimer?
-Ella es una mujer que quedó atrapada en los años 90, tiene una demencia bastante avanzada y además ha tenido una vida trágica, le han pasado cosas tristes y se quedó pegada como en un mundo de fantasía, está en una desconexión completa con la realidad. Me puse a estudiar este tema y me di cuenta de que no sabemos realmente qué es lo que piensa o lo que siente alguien con esta enfermedad. Sé que pasan momentos de mucha angustia, de no saber dónde están, quiénes son, pero creo que también pasan por momentos de desconexión, una cierta serenidad en un mundo paralelo.
-Y usted Jorge, ¿qué piensa del cuidado y la contención que se da entre esta pareja?
-Es lo más natural y lo más hermoso que existe en la naturaleza, algo que hasta en los animales ocurre y a uno, en esas circunstancias, le aparece su lado más animal. Esta película a mí me pilla en la etapa justa de la vida para entender este tema. Trabajar con Jorge Olguín fue muy agradable, fue intenso también porque grabamos en unos pocos días, la técnica de filmación que usó era muy buena, las cámaras eran magníficas.
Rodaje corto
Olguín agrega que el rodaje fue bien ajustado porque previamente pudieron ensayar largo y tendido. "El trabajo fue muy rápido porque incorporamos una tecnología nueva, se utilizó una cámara nueva en 4K para filmar cine que nos permitió agilizar el rodaje que fueron como siete días, un tiempo record que también se logró porque Mónica y Jorge tienen un gran training frente a la cámara, son una pareja que llevan trabajando décadas en teatro y televisión, además de cine, así que fue fácil dialogar con ellos en torno al proceso de creación de los personajes. Fue bonito e intenso, fue muy armónico y creativo.
Cuenta Mónica que la filmación ocurrió en julio de 2022, pero el proyecto venía gestándose desde antes de la pandemia del covid. Para Jorge Gajardo la añosa casa es un personaje más en sí que aporta el tono crepuscular que inunda la pantalla: "Es una especie de protagonista y las calles del barrio. Yo ya cumplí 87 años y me pasa que cuando veo la película como que me estoy mirando hacia el futuro".
-Mónica, ¿qué reflexiones tiene sobre el permanecer en pareja hasta las últimas circunstancias?
-Cuando uno llega a ese momento de la vida en pareja y aprende a cuidarse es algo muy bonito, es una lección de vida en el fondo porque hay dos posibilidades: o llegas a viejo con tu pareja odiándote, gritándote y descalificándote todo el día, o llegas con tu pareja a un momento de serenidad y de comprensión, de apoyo y cariño. Yo creo que esto último es lo que transmiten estos dos personajes que se protegen y que no pueden vivir el uno sin el otro.