El terror tailandés llega a la cartelera cinematográfica con el film "La Secta"
ESTRENO. La nueva cinta de Sophon Sakdaphisit está basada en hechos reales que ocurrieron en Bangkok.
Amelia Carvallo
Precedida de muy buenas críticas y taquilla, este jueves llega a los cines chilenos "La Secta", nueva película del director tailandés Sophon Sakdaphisit, de quien se puede ver en el streaming los filmes "The Promise", "Ladda Land" y "Coming Soon", todas ellas en Apple TV y Netflix.
Oscuro culto
Parte de la nueva camada de realizadores asiáticos que adhieren al género del terror, como el indonesio Joko Anwar ("Los Huérfanos"), sus compatriotas Parkpoom Wongpoom ("Shutter") y Banjong Pisanthanankun con quien codirigió "La médium" en 2021, Sophon Sakdaphisit comanda con pulso firme los 124 minutos que dura "La Secta", una ficción que está basada en hechos reales que acontecieron en Bangkok, la capital de Tailandia, a una familia compuesta de madre, padre y una hija de siete años que se vieron envueltos en una escalofriante pesadilla que los involucró con un oscuro culto.
Llevados por una serie de circunstancias desconectadas, y en apariencia fruto del azar, la joven pareja formada por Ning (Nittha Jirayungyurn) y Kwin (Sukollawat Kanarot) decide arrendar su bonita y espaciosa casa a Ratree (Penpak Sirikul), una misteriosa doctora jubilada, y su hija Nuch (Namfon Pakdee) de 40 años años.
No sin tensionar la paz conyugal, el matrimonio decide mudarse junto a su querida hija Ing (Thanyaphat Mayuraleela), al pequeño departamento que conservaba la madre de sus días de soltería, un espacio incómodo donde esperan ahorrar dinero para enfrentar las zozobras económicas.
Al igual como sucede en "El bebé de Rosemary" y en "El Inquilino", ambas películas de Roman Polanski, que buceó muy bien en ese tipo de terror, acá también estamos ante lo ominoso de un culto satánico, la fragilidad de la armonía y la cordura de una familia que está formándose y las presencias malignas que puede alojar el sitio que llamamos hogar.
La joven madre, siempre más perspicaz y alerta, empieza a notar que su esposo se ha vuelto taciturno y que parece desconectado de la realidad. Pronto descubre que por las madrugadas se levanta y se encamina hasta la azotea del edificio donde han empezado a llegar bandadas de cuervos. Una de esas noches decide seguirlo y lo que ve la alerta porque comienza a entonar cánticos con un libro de tapas rojas en el regazo. Al otro día alcanza a ver el libro dentro de su mochila y descubre que sus páginas están en blanco. Además, en el cuello de su esposo hay un extraño tatuaje que él dice que no tiene importancia.
Por otro lado, su antigua vecina le comenta que las nuevas inquilinas tienen comportamientos raros, que todas la madrugadas, a eso de las cuatro, se alzan cánticos extraños y aparecen cuervos en el cielo del barrio. Ning se aterroriza cuando ve que a su hija le ha aparecido en la piel una erupción con la forma del mismo tatuaje que tiene su esposo y, aumentando su sospecha, el comportamiento de este se vuelve cada vez más peligroso, quizás acechado por unas oscuras fuerzas que se alimentan de una culpa.
Con giros e imágenes que la vuelven espeluznante, "La Secta" nos hace conectar con sus personajes que batallan contra fuerzas desconocidas que, quizás, los han escogido por su alto grado de vulnerabilidad. La mecánica del ritual secreto que de noche desvela, y el amanecer como un zombie para enfrentar la cotidianeidad es quizás el punto donde esta película conecta con la audiencia.
Idilica tailandia
Una de las primeras películas en las que participó Sophon Sakdaphisit, esta vez como guionista, fue en "Están entre nosotros", un filme sobre un fotógrafo y su novia que empiezan a descubrir extrañas imágenes en las fotos análogas que toman, un claro saludo a la bandera para "Blow-Up", la película de 1966 de Michelangelo Antonioni basada en el cuento de Julio Cortázar, "Las babas del diablo", que también sigue los pasos de un fotógrafo que descubre que un hecho de sangre empieza a tomar vida dentro de sus fotos. En 2011, Sakdaphisit llegó a la cartelera con "Ladda Land", una película que también se basa en hechos reales y que sucede en un complejo habitacional abandonado al que llegan a vivir un oficinista llamado Thee junto a su mujer y sus pequeños hijos.
Conocida como La Tierra de las Sonrisas y paraíso asiático por antonomasia, Tailandia es para muchos sinónimo de hermosos atardeceres como los que ofrece la playa de Sai Kaew en la isla Phuket, uno de los principales destinos turísticos de ese país, lugar donde se han rodado películas como "La Playa" con Leonardo DiCaprio, "Lo imposible" sobre el tsunami de 2004 y "El hombre con el revólver de oro" y "El mañana nunca muere" de la saga de James Bond.
La cocina thai, la misteriosa jungla, el masaje tailandés, así como la producción de droga y el tráfico sexual están dentro del muestrario que ofrece este asombroso país que, al parecer, ya sería el destino de la tercera temporada de la exitosa "The White Lotus" de HBO Max, la punzante serie que ya nos ha llevado a Maui en Hawái y a Taormina en Sicilia donde se urden las vidas de diversos huéspedes y los empleados de un complejo turístico.