Tras las últimas declaraciones vertidas en La Tercera por la diputada Catalina Pérez, hubo muchos que dudaron de la veracidad de sus exposiciones. Principalmente a que no tenía conocimiento alguno de lo que ocurría con los convenios entre el Minvu, cuyo seremi era su exjefe de Gabinete, Carlos Contreras y la Fundación Democracia Viva, cuyo representante legal era su expareja, Daniel Andrade, estos últimos expulsados de RD, tras el estallido del conflicto.

Entre quienes no creyeron la versión de la parlamentaria está el gobernador regional Ricardo Díaz, quien militó en RD y que renunció, según sus palabras, por algunos indicios de falta a la probidad que en el camino detectó en la tienda.

Pero fue un poco más allá y dijo que lo ocurrido en Antofagasta era algo grave. "Yo me salgo de RD por cuestionamientos a los actos de probidad que ella (la diputada) estaba haciendo con su grupo de cercanos. Aquí, desde mi opinión, lo que había era un intento de ir juntando recursos para futuras elecciones".

Agregó que el sistema estaba bien planeado y se necesitaban los recursos para una futura campaña a senadora de Pérez; a diputado de Daniel Andrade, que su exjefa territorial postularía a la municipalidad y que la pareja del exseremi Contreras compitiera por la gobernación.

Son acusaciones graves, que se deberán investigar y que los involucrados tendrán que responder, pero si se mira desde fuera tienen sentido.

Obviamente los partidos noveles enfrentan como principal problema la falta de recursos para sus campañas y el sistema de convenios tenía algunos vacíos que posibilitaban la recaudación de fondos para esos fines.

Es bueno recordar que los argumentos de defensa en el caso Convenios siempre estuvieron asociados a afanes de ayudar a los más necesitados. Lo criticable es que en estos casos esos recursos se habrían utilizado con fines mezquinos para futuras campañas electorales.

Del amor irradian los conceptos más altos y nobles que existen en la conciencia humana, y hacia el amor convergen los reflejos del mundo para transmutarse en belleza, conocimiento y bondad.

Poderosos sentimientos del amor que sirve de gravedad en el eterno mudarse de las cosas y que sirve de perpetua atracción de las almas.

¿Quién puede desconocer, por otra parte, la fuerza social del amor como elemento básico de la solidaridad humana? El amor explica, comprende, otorga, concede, perdona y ata. Si los vástagos de la gran familia humana continúan unidos, no es por una idea vaga de justicia, sino por el sentimiento concreto del amor.

Si las ideas, según Platón, son instrumentos mentales que sirven para explicarse a realidades sensibles que llamamos cosas y extraer de ellas un principio de orientación; confesamos que somos idealistas platónicos. Atravesamos el mundo con nuestro ideal de amor y justicia; dichoso dentro de la pobreza; resignados ante el desengaño y firmes ante la adversidad. Y como el Quijote, siempre hambriento de generosidad y humanismo, deseando morir con nuestra quimera tan bella la razón, ya que el corazón tiene convicciones que a la razón extraña. En una palabra, somos soñadores ya que soñar es pensar, sentir y accionar sin límites.

¿Por qué Demócrito se proclamó ciudadano del mundo?

¿Por qué Sócrates al preguntársele cuál era su patria contestó: "Toda la Tierra", dando a entender que se creía ciudadano de todos los lugares donde hay hombres?

¿Por qué Sófocles en su tragedia "Antigónica" pone en labios de éste al replicar al rey de Tebas: "Mi corazón está hecho para sentir el amor y no el odio"?

¿Por qué Marco Aurelio exclama "¡Oh! alma mía, sentiré al fin la felicidad de amar y querer a la humanidad.

¿Por qué Séneca aconseja: "Es necesario que viváis para otros, si es que queréis vivir para nosotros mismo"?

¿Por qué Voltaire dice: "Desde la India hasta la Francia, el sol no se ve más que una sola e inmensa familia que debe regirse por las leyes del amor: mortales, todos sois hermanos"?

Pues por la sencilla razón de que sin amor, alimento de corazones, la vida no es posible. Porque el amor es el único capaz de engendrar un alma apasionada de justicia, de grandeza. De hermosura y de verdad. Porque el amor, embellece el deseo cuando aspira a un poco más de felicidad y de dicha en la vida, admirando en él su pureza y capacidad. Porque el amor, según el cantar de los trovadores, es un himno universal que en la flor se revela con el aroma, en el pájaro con el cantar, en el hombre con la poesía. Porque el amor, es un canto sobrio no aprendido todavía que nos empuja a vivir con dignidad y a morir sin cobardía. Porque el amor, afirma Hesíodo en su Teogonía, es el más hermoso de los inmortales, que reina así entre los dioses como entre los hombres, enternece las almas, cambia el corazón y se antepone a las resoluciones más sabias. Porque el amor, es el Divino Todopoderoso. Porque el amor, engalana la vida con muchos sueños e idealiza la realidad para embellecerla y convertirla en una caricia interminable. Porque el amor, es la afirmación constante del hombre a realizar su esencia humana. Porque la alegría del amor, crece a medida que el alma se ennoblece. Porque el amor, transforma las lágrimas en un fondo de dulzura.