Con un gol de Olga Carmona en la primera mitad, España derrotó a Inglaterra en una electrizante e inédita final que la consagró campeona del mundo en la certamen disputado en Australia y Nueva Zelanda.
Los primeros minutos fueron de mucha intensidad, con ambos equipos buscando el balón y llegando constantemente al arco rival ante 76 mil espectadores.
Una sólida Aitana Bonmatí exhibió una vez más su liderazgo y fue la encargada de dictar el ritmo desde el medio del campo, demostrando por qué minutos más tarde le darían el premio a mejor jugadora del certamen.
Pero las vigentes campeonas europeas no lo hicieron fácil y sobre todo por la actuación de Lauren Hemp. Fue la responsable del primer tiro al arco del partido y casi inauguró el marcador a los 15' con un disparo que dio en el palo.
La intensa marca le exigió creatividad a la selección española, que buscaba alternativas por las bandas, por el centro, por el alto, con Jenni Hermoso, Alba Redondo, Salma Paralluelo, Tere Abelleira, Mariona Caldentey y Olga Carmona.
Y fue precisamente Carmona, autora del gol de la victoria que metió a España en la final, quien abrió la cuenta justo antes de la media hora, con una anotación que puso el broche de oro a una jugada colectiva.
Empezó con Bonmatí robando el balón, tuvo un preciso pase largo de Abelleira, contó con una asistencia de Caldentey y culminó con el eficaz disparo de la lateral del Real Madrid.
En la zona defensiva, Irene Paredes, Laia Codina y Ona Batlle se aseguraron de cerrar las filas, en tanto que Cata Coll una vez más cumplió y se amuralló bajo el pórtico. Con el gol sufrido, Inglaterra se desestabilizó y prácticamente no vio portería, por lo que su rival aprovechó para buscar el segundo.
Las españolas mantuvieron el mismo apetito y Paredes estuvo cerca de ampliar la ventaja, pero pocos centímetros que separaron el balón de la red. Asimismo, un remate en el palo de Paralluelo cerró el último minuto del primer tramo.
Para la segunda parte, la entrenadora de Inglaterra, Sarina Wiegman, decidió cambiar las cosas en el terreno de juego y optó por el ingreso de Lauren James y Chloe Kelly en relevo a Alessia Russo y Rachel Daly, respectivamente. Las modificaciones funcionaron y las inglesas adoptaron una postura más agresiva.
Con las españolas claramente dominantes, el 2-0 se anunciaba. La ocasión vino con un empuje del combinado británico y la mano en el área de la defensa Jess Carter, aunque Hermoso falló el penal -el segundo que pierde en el torneo- y desperdició la oportunidad de aumentar la superioridad en el marcador.
Las entradas de Oihane Hernández, Ivana Andrés y Alexia Putellas dieron nuevo aliento a España, que fue capaz de resistir a la presión y múltiples faltas de Las Leonas, en una actuación en la que tuvo especial relevancia las tapadas de la arquera Coll.
Así, España selló la conquista de la primera estrella mundialista para una selección que trazó una consistente hoja de ruta y entró a la historia.
La gran polémica
Cuando las autoridades hacían entrega de las medallas a las futbolistas españolas, el presidente de la Federación de ese país, Luis Rubiales, tomó la cabeza de Jenni Hermoso y le robó un beso en la boca.
La situación causó el repudio en redes sociales y en medio de una transmisión en vivo por Instagram, la jugadora afectada aseguró que "no me ha gustado nada".