NotCo: ¿Por qué no?
La denominada "guerra de la leche" vivió un hito importante cuando el Primer Juzgado de Valdivia resolvió favorablemente la demanda por competencia desleal presentada por la Asociación Gremial de Productores de Leche de la Región de Los Ríos (Aproval) en contra del uso de la marca "NotMilk". La molestia de los lecheros estriba en la utilización de signos que pueden hacer que el consumidor perciba el producto como leche. Sin embargo, puede decirse que la clave de este caso va más allá de la identidad de marca de un producto, pues radica en sus efectos perniciosos para la innovación y la creación de valor.
El tribunal ha aceptado que la negación de un algo (en este caso, la leche a través de la fórmula marcaria "NotMilk") confunde al público al presentarlo como ese mismo algo. Cosa curiosa que debería entonces cuestionar otras prácticas comunicacionales, como la de productos para celíacos que, al tachar el ícono del trigo, podrían hacer creer que aquello es efectivamente trigo o que al menos lo contiene. Las propias empresas de productos lácteos acostumbran usar íconos de fruta para comunicar el sabor de un producto, aunque contenga solo el gusto artificial del mismo y no el fruto como ingrediente.
Lo anterior sugiere que en el caso contra NotMilk no es el recurso comunicacional lo que realmente molesta, sino el ánimo de "trancar la pelota" y ganar tiempo frente a una innovación competitiva.
Arrogarse la cautela del mejor entendimiento de un mensaje puede llegar a ser laudable, pero en este caso parece un error que hace recordar la famosa frase de uno de los fundadores de la publicidad mundial, David Ogilvy, quien tenía escrita en la entrada de su oficina lo siguiente: "El consumidor no es idiota. El consumidor es su esposa, no insulte su inteligencia".
Más allá del accidente que puede representar este fallo, hay un legalismo que atenta contra la innovación. La filosofía de NotCo es la creación de una oferta sobre la base de vegetales que sustituye los alimentos de origen animal. Negar el uso de un apelativo que sitúa lo anterior en una utilización universal de los signos de representación no es un simple problema de marca. No es que se trate de una suerte de publicidad comparativa y que tarjar una vaca sea un truco meramente persuasivo. En el caso de NotCo lo que se ha prohibido vía judicial es la negación de la filosofía del producto y lo que hay detrás de él, rechazando la divulgación del beneficio primario del mismo.
Resulta cuestionable que un fallo aluda no solo a la invalidez de un producto, sino que se pronuncie también en contra de la capacidad de generar valor de una empresa, coartando la libertad que debe asistir a cualquier emprendedor y dando la señal equivocada a quienes vemos en estos innovadores una posibilidad de unicornios nacionales.
"En el caso contra NotMilk no es el recurso comunicacional lo que realmente molesta, sino el ánimo de "trancar la pelota" y ganar tiempo frente a una innovación competitiva.
"Resulta cuestionable que un fallo aluda no solo a la invalidez de un producto, sino que se pronuncie también en contra de la capacidad de generar valor de una empresa.
* Centro de Estudios de la Comunicación (ECU) Universidad de los Andes