El ataque de los jueces de las malas películas
Los premios Razzie, que se entregan desde el año 1980 en paralelo a los Óscar, funcionan como una gran broma para aplacar las aspiraciones de la Academia. Y nos permiten reflexionar sobre lo desechable.
¿Qué es una mala película? En 1980, el crítico J. Hoberman se hizo cargo de esta pregunta en el artículo "Bad Movies" (publicado en la revista "Filmcomment") y llegó a conclusiones interesantes, como que el contexto cultural es fundamental para la valoración de una obra o, refiriéndose a lo que llama "películas objetivamente malas", que la relevancia rupturista que puede traer el error es un aporte al cine como arte.
Ese mismo año, el publicista John B. Wilson vio "Can't Stop the Music" y "Xanadu" en una función continuada en Los Ángeles y tuvo la idea de construir unos galardones destinados a "películas malas". La primera ceremonia de los Golden Raspberry Awards, como se conocían anteriormente, fue en el living de su casa, en 1981, durante la entrega de los Oscar. La segunda y la tercera contaron con mayor público. La cuarta, realizada en un colegio, fue cubierta por CNN y, de alguna manera, catapultó a los premios al estrellato.
A medida que ganaba notoriedad, Wilson fue entendiendo que no era buena idea tratar de competir con los Oscar en una misma noche. Movió los Razzie -conocidos acá como Premios Frambuesa- para el día anterior a la ceremonia de la Academia. Así estableció una tradición que continúa hasta el día de hoy,
Este año, los organizadores de los Razzie cometieron el error de nominar a una niña en la categoría de Peor actriz. Se trata de Ryan Kiera Armstrong por "Firestarter". Como consecuencia, y tras críticas públicas, el galardón se lo llevaron ellos mismos por "su error número 43 en las nominaciones a Peor actriz".
La Peor película fue para "Blonde", retrato cruel de la degradación de Marilyn Monroe que acumuló 8 nominaciones. También recibió el premio a Peor fotografía, una decisión algo injusta ya que cuenta con un trabajo visual bastante asombroso. Estos reconocimientos se dieron a la par de la nominación de la actriz Ana de Armas en los Oscar por la misma cinta.
El premio a Peor actor recayó en el siempre sobreactuado Jared Leto por "Morbius". De esta producción surgió también la peor actriz de reparto: Adria Arjona, hija de Ricardo.
Tom Hanks se llevó la estatuilla a Peor actor de reparto por su interpretación del Coronel Tom Parker en "Elvis", obra que paralelamente contó con ocho nominaciones en los Oscar.
El Premio Redentor, otorgado a figuras que han repuntado, fue para Colin Farrell, nominado este año al Oscar por "Los espíritus de la isla" a pesar de haber ganado un Razzie en 2004 con "Alexander".
El Peor remake recayó en la nueva versión de "Pinocho", de Disney. Y la Peor dirección en "Good Mourning", comedia co-dirigida por el cantante Machine Gun Kelly y Mod Sun.
Los Razzie son una broma, tal vez necesaria para aplacar las altas aspiraciones de los Oscar, que nos lleva a la misma pregunta que se hizo Hoberman en 1980. ¿Qué es una mala película? ¿Una obra fallida? ¿Una creación rechazada por el gran gusto? En era de contenidos -como Scorsese llamó a las ofertas de streaming- y decisiones tomadas de acuerdo a focus groups, una mala película podría ser una obra calculada y construida con minuciosidad funcional y no, como se ha creído hasta ahora, un filme que se atreva a tomar riesgos. Es una reflexión que los Razzie podrían abrir para contribuir a una diálogo fundamental en estos tiempos de exitismos y fórmulas probadas.
Los razzies este año señalaron como una mala película a "blonde", pero también a "El resplandor" en el año 1981".
En resumen
Los premios Razzie partieron en el living de la casa de John B.Wilson. Hoy, se lanzan un día antes de los esperados Premios Oscar.
Por Andrés Nazarala R.
fotograma de blonde