El combate contra el narcotráfico
Es imperioso buscar las fórmulas para impedir que el crimen organizado siga escalando y poniendo en peligro la seguridad de un país. El narcotráfico es un delito sumamente peligroso y de ello somos testigos a diario en nuestras fronteras y fuera de ellas. Por eso se debe cortar su avance con creatividad y decisión.
Hace unas semanas la decisión del alcalde de La Florida, Rodolfo Carter, de iniciar el plan de demolición de las que denominó "narco-casas", fue largamente cubierto a nivel nacional, incluso su par de Antofagasta, Jonathan Velásquez, viajó hasta la capital para conocer los detalles del procedimiento. Era primera vez que una autoridad realizaba una acción de esta índole contra el narcotráfico, y que abrió una nueva estrategia para combatirlo.
Obviamente, esta decisión se amparó en la ley de Urbanismo, que permite a los municipios ordenar demoliciones de inmuebles que incumplen la normativa habitacional en cuanto a los deslindes y ampliaciones sin autorización.
Es decir, en el fondo se busca demoler viviendas que son utilizadas para acopio y venta de drogas, pero el resquicio legal que se utiliza para hacerlo, es la Ley de Urbanismo.
Esta medida, ha tenido más comentarios a favor que en contra, porque logra romper la cadena de financiamiento de estas bandas, las que incluso siguen operando mientras sus líderes cumplen condenas de presidio.
Con ese golpe se logra limpiar los barrios del tráfico de estupefacientes y de paso deja sin recursos a los operadores, quienes quedan atados sin poder seguir adelante con su negocio ilegal.
No son pocos quienes han manifestado que imitarán lo hecho en La Florida. El alcalde de Antofagasta se mostró abierto a adoptar procedimientos similares, previo estudios y análisis de los inmuebles que intervendrían.
Mientras que el jefe comunal de Calama, Eliecer Chamorro, viene trabajando en lo mismo hace meses. Ya en enero informó que contaban con el catastro proporcionado por los estudios de inteligencia de las policías con el apoyo de la fiscalía local y estaba pronto a ponerlo en marcha.
Con ello estamos frente a un momento importante de cómo las autoridades idean estrategias para combatir al narcotráfico que avanza en los distintos barrios del país, provocando dependencia y abriendo una cadena de robos, balaceras y muerte. Por ello, era tiempo de actuar y aspirar a que estas medidas sumadas a las de persecución del delito sean efectivas.
El narcotráfico es un delito sumamente peligroso y de ello somos testigos a diario en nuestras fronteras y fuera de ellas. Por eso se debe cortar su avance con creatividad y decisión.