El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ordenó un alto el fuego de 36 horas a partir del mediodía de hoy viernes (hora Moscú) a lo largo de toda la línea del frente en Ucrania, informó el Kremlin. Sin embargo, hasta la última jornada los ataques no habían menguado y Ucrania reclamó que habrá tregua cuando Rusia abandone los territorios ocupados.
Según la nota de la Presidencia rusa, la decisión del jefe del Estado es en repuesta al llamado del patriarca de la Iglesia ortodoxa rusa, Kiril, de establecer una tregua de Navidad, que los creyentes ortodoxos celebran el 7 de enero.
"Debido a que en la zona de acciones militares vive un gran número de ciudadanos ortodoxos, llamamos a la parte ucraniana a declarar un régimen de alto el fuego para permitirle acudir a los templos la víspera de Navidad y el día de Navidad", señala el comunicado oficial.
Horas antes, Kiril había pedido una tregua para que los fieles pudiesen celebrar la Navidad.
"Yo, Kiril, patriarca de Moscú y toda Rusia, llamo a toda las partes involucradas en este conflicto intestino a un alto el fuego y establecer una tregua de Navidad", dijo en su llamado, publicado en la página web de la IOR.
La tregua propuesta por el jefe religioso para que los creyentes puedan acudir a los templos en Nochebuena y Navidad debe entrar en vigor a las 12.00 horas de Moscú hoy viernes y se extenderá hasta las 00:00 horas del día 7, el mismo plazo del alto el fuego ordenado por Putin.
Es la primera vez que el Presidente ruso dispone un alto el fuego en todos los frenes desde que lanzó el 24 de febrero pasado su campaña militar en Ucrania con el objetivo de "desnazificar y desmilitarizar" el vecino país.
En paralelo, Putin afirmó en una conversación telefónica con su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan, que está dispuesto a dialogar con Ucrania si el Gobierno cumple sus condiciones y toma en cuenta las "nuevas realidades territoriales", informó el Kremlin.
Según los rusos, las nuevas realidades territoriales son la anexión en septiembre pasado de cuatro regiones ucranianas, Donetsk, Lugansk, Zaporiyia y Jersón, además de Crimea, anexionada en 2014.
Ucrania no Cree
En este escenario, la expresada apertura al diálogo y el llamado a tregua no tuvieron buena recepción en Kiev.
"La declaración de la IOR sobre una 'tregua de navideña' es una trampa cínica y un elemento de propaganda", escribió en Twitter el asesor de la Presidencia ucraniana, Mijailo Podolyak, poco después del llamado realizado por el patriarca ortodoxo, Kiril.
La Iglesia ortodoxa rusa actúa como "propagandista" de la guerra, agregó Podolyak, y enfatizó que la institución incita al genocidio de los ucranianos y a la militarización de la sociedad rusa.
En la misma línea se expresó más tarde tras la confirmación del Presidente Putin del alto al fuego.
Podolyak, una de las figuras más cercanas al presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, aseguró que Ucrania no está atacando sino defendiendo su territorio y calificó de "hipócrita" el anuncio ruso.
"En primer lugar, Ucrania no ataca territorio extranjero y no mata a civiles, como hace la Federación Rusa. Ucrania sólo destruye a los miembros del Ejército de ocupación en su territorio", argumentó Podolyak en rechazo a la tregua temporal.
"Segundo, la Federación Rusa debe abandonar los territorios ocupados. Sólo entonces tendrá una 'tregua temporal'. Guardaos vuestra hipocresía", concluyó.
Por su parte, la ministra de Relaciones Exteriores alemana, Annalena Baerbock, opinó que si el Kremlin quisiera la paz, retiraría sus tropas de Ucrania. Con ello, "la guerra se habría terminado", dijo en Twitter.
Por el contrario, es "evidente" que el presidente ruso tiene la intención de continuar con la guerra, "tras una breve interrupción", señaló. Además, argumentó que ante "el miedo" un así llamado alto el fuego no implica seguridad.
Inédito Envío
Al cierre de esta edición, Estados Unidos anunció que mandará por primera vez carros blindados a Ucrania, en concreto vehículos de combate de infantería Bradley, al igual que Alemania, que mandará otros de fabricación propia de tipo Marder.
Así lo anunció la Casa Blanca en un comunicado en el que informó de una conversación telefónica entre el presidente estadounidense, Joe Biden, y el canciller alemán, Olaf Scholz, en la que compartieron "puntos de vista sobre la continua guerra de agresión de Rusia contra Ucrania".
Ataques rusos y contraofensiva
Rusia no cesó hasta último momento previo a la tregua sus intentos de capturar Bájmut, bastión ucraniano en la región oriental de Donetsk, mientras las autoridades de Kiev acordaban con sus aliados occidentales nuevos suministros de armamento, claves para su anunciada contraofensiva de marzo. Los esfuerzos rusos chocaron con la enconada resistencia de las fuerzas ucranianas, debido a que el control de la ciudad es clave para la defensa de Sloviansk y Kramtorsk, las dos mayores zonas fuertes de las tropas de Kiev en la región de Donetsk. La guerra ya destruyó en un 60% la ciudad, que llegó a tener más de 70.000 habitantes.