El día en que Wuhan volvió a confinarse por el covid-19
Cinco días de encierro en un distrito y precauciones extremas en Beijing. Una consultora cree que las restricciones terminarán en China en 2024. Las subvariantes de ómicron son la nueva amenaza en este país y en Europa completa.
Un distrito con casi un millón de habitantes de la ciudad china de Wuhan decretó este miércoles un confinamiento de cinco días, que está a pocas horas de terminar, debido a un rebrote de covid-19 en sus calles.
La decisión muestra nuevamente lo lejos que se encuentra China de la normalidad pospandémica más de dos años y medio después de que la ciudad en la que supuestamente se inició la pandemia fue confinada por primera vez.
El distrito de Hanyang confinó a sus 900.000 residentes, pidiéndoles que permanezcan en sus hogares y que no salgan a no ser que sea estrictamente necesario.
Las medidas incluyeron el control de las carreteras y el cierre de los accesos al distrito, además de a las comunidades durante estos cinco días. Además, todos los habitantes del distrito se deben realizar una prueba PCR diaria durante la cuarentena.
¿Qué ocurrió para tomar semejante decisión? Fueron confirmados 15 casos asintomáticos en el distrito el martes.
La ciudad de once millones de habitantes mira de reojo estos acontecimientos, preocupada por la historia reciente, a pesar de que hasta ahora las restricciones se limitan solo a ese distrito.
Otras poblaciones del gigante asiático se encuentran en una situación similar sin que se haya decretado necesariamente un confinamiento oficial.
Vecindarios de capitales provinciales como Xining o Zhengzhou, están confinados, según testimonios en redes sociales recabados por la agencia de noticias Efe.
Política cero covid
China, aferrada a una estricta política de "cero covid" que descarta convivir con el virus, lleva más de cinco meses lidiando con rebrotes de la variante ómicron, con el caso más serio ilustrado por la cuarentena de la megalópolis de Shanghái (26 millones de habitantes) durante más de dos meses, que también esta semana volvió a aumentar las precauciones limitando aforos, recomendando no salir de la ciudad si no es necesario o restringiendo foros, encuentros y otros eventos "no indispensables".
La estrategia consiste en estrictos controles fronterizos, el aislamiento de todos los contagiados y sus contactos cercanos y restricciones a la movilidad y campañas de pruebas PCR donde se detecta algún caso.
En las grandes ciudades, incluso, se ha instaurado la práctica de "pruebas PCR normalizadas", según la cual los habitantes deben presentar pruebas negativas realizadas en las 24, 48 o 72 horas previas para acceder a lugares públicos.
Además de incalculables pérdidas económicas, estas duras medidas han provocado muestras visibles de irritación y descontento en la población.
Durante el XX Congreso del Partido Comunista de China (PCCh), celebrado la semana pasada en Beijing, ni en el discurso de Xi Jinping ni en las comparecencias de los distintos voceros se dejó entrever un cambio de estrategia.
La consultora Capital Economics ya sitúa en 2024 sus pronósticos de una retirada significativa de restricciones debido a la baja tasa de vacunación entre los ancianos, vulnerables frente al coronavirus.
Según la autoridad sanitaria china, desde el inicio de la pandemia se infectaron 258.167 personas y 5.226 fallecieron, aunque la cifra total de infectados excluye a los asintomáticos.
Subvariante ómicron
Al mismo tiempo que se decretaba el nuevo confinamiento en Wuhan, la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) advertía que la pandemia "aún no ha terminado" y la mutación del virus que causa el covid es "más rápida" que el proceso de actualización de las vacunas, por lo que el Viejo Continente espera una "nueva ola en las próximas semanas" por nuevas subvariantes de ómicron.
Marco Cavaleri, jefe de Estrategia de Vacunación en la EMA, explicó que ya "estamos viendo un incremento general casos de covid y de la cifra de muertos" por esta enfermedad en Europa, así como un aumento de las hospitalizaciones de pacientes mayores de 65 años.
"Se espera una nueva ola en las próximas semanas causada por subvariantes de ómicron, según datos recogidos por el Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC). La pandemia aún no ha terminado y todavía estamos en una emergencia global", sentenció.
La subvariante de ómicron conocida como BQ1 ha sido ya identificada en al menos cinco países europeos y, según el ECDC, amenaza con ser la predominante a finales de noviembre o principios de diciembre. Aunque no está claro si causará un covid más grave, "sí se sabe que tiene una alta capacidad de esquivar la inmunidad obtenida por vacunación o contagio natural, incluido con ómicron".
La mutación detectada del SAR-CoV-2, el virus que causa el covid-19, demuestra que el virus es "más rápido de lo que podemos ser en la adaptación de las vacunas" y, además, solo se debería considerar la actuación de las dosis "cuando la diferencia entre las cepas en circulación y la composición de las vacunas sea mayor".
Además, se espera que tanto el SAR-CoV-2 como el virus de la gripe circulen al mismo tiempo en Europa, lo que aumenta el riesgo para las personas más vulnerables.
Wuhan durante su primer gran confinamiento.
BQ1 se llama la subvariante de ómicron que ya está en cinco países de Europa y es capaz de eludir las vacunas, aunque no se sabe si causará un covid más grave..