Jackson abre nuevo conflicto tras aludir a "escala de valores" y la DC lo acusa de intervencionismo a un mes del plebiscito
POLÉMICA. El ministro afirmó que este Gobierno se diferencia de "la generación que nos antecedió" y ante la ola de críticas debió disculparse. Además, la bancada de diputados falangista ofició a Contraloría por su idea de recibir propuestas constitucionales.
Las declaraciones públicas de los ministros se han vuelto un problema durante la última semana, abriendo reiteradamente flancos de conflicto para el Gobierno. Izkia Siches provocó la molestia de diputados de oposición al señalar que los que apuntan a La Moneda como responsable de la violencia en la macrozona sur "se pegaron en la cabeza". El martes, el titular de Economía, Nicolás Grau, se ganó el rechazo de las pymes al afirmar que estas empresas la inflación les trae "costos y beneficios". Y ayer el ministro de la Segpres, Giorgio Jackson, fue el centro de una nueva polémica.
La noche del martes, durante una transmisión a través de Twitch con el streamer "Wingz" y la editora de Contexto Factual, Valentina Matus, Jackson afirmó que "nuestra escala de valores y principios en torno a la política no solo dista del Gobierno anterior, sino que creo que frente a una generación que nos antecedió, que podía estar identificada con el mismo rango de espectro político, como la centroizquierda y la izquierda. Yo creo que estamos abordando los temas con menos eufemismo y con más franqueza. Tenemos infinitamente menos conflictos de interés que otros que trenzaban entre la política y el dinero".
Estas expresiones generaron diversas reacciones de rechazo. Desde la Democracia Cristiana, la diputada Joanna Pérez deslizó la necesidad de removerlo de la Segpres: "Él tiene la prioridad número uno para no sostenerse en el espacio, siendo antes o después del 4 de septiembre. Ya es muy difícil que logre interactuar con bancadas".
Asimismo, anunció que su bancada ofició a la Contraloría para investigue la regularidad de las acciones del ministro, quien dijo que su cartera podía canalizar eventuales propuestas de modificación a la nueva Constitución desde los partidos oficialistas antes del 4 de septiembre, lo que fue calificado por el también diputado DC Eric Aedo como "el mayor intervencionismo que he visto desde 1988 en dictadura" porque según planteó "es ilegal que reciba en el corazón de La Moneda propuestas de la reforma para el Apruebo".
Incluso el líder de la Cámara, diputado PPD Raúl Soto, dijo que "el gobierno tiene que quedar más desde atrás, más al margen de este debate y, al menos, no me parece que sea la Segpres la que canalice esto a través de un proceso donde sea el ministro Jackson quien esté recibiendo, ordenando o sistematizando esta información en un contexto electoral".
"no caer en su juego"
Los dichos de Jackson sobre los valores no tuvieron respaldo en el Gobierno. El Presidente Gabriel Boric afirmó en Mega que "no hay ninguna superioridad moral respecto a nuestros antecesores. Tenemos que aprender de quienes nos antecedieron".
El ministro de Hacienda, Mario Marcel, planteó que "somos personas de generaciones muy distintas las que nos encontramos en cargos de responsabilidad o liderazgo, y más allá de los méritos o las falencias de cada generación, la diversidad es lo más importante en Chile".
La ministra del Interior, Izkia Siches, apuntó que "este es un Gobierno constituido por múltiples generaciones". Eso en público, porque en un grupo de WhatsApp con presidentes de partidos oficialistas, dijo que "estamos en el ojo del huracán. Buscarán cualquier cosa para hacernos pelear, distorsionar y dañar. Muy atentos a los errores no forzados y ano caer en su juego".
Ante el revuelo, Jackson ofreció "sinceras disculpas. Me expresé mal, no debí haber dicho algunas cosas de ideas políticas de la forma que lo dije. Hemos aprendido que no hay ningún discurso a partir de la superioridad moral que pueda converger en la unidad de propósito que esperamos tener y, por eso, asumo que no estuvo bien lo que yo expresé".
Comisión aprobó 4/7 para reformas
La Comisión de Constitución de la Cámara de Diputados aprobó ayer en general, por 11 votos a favor y uno en contra, el proyecto de ley que busca rebajar de 2/3 a 4/7 el quorum para hacer reformas a la actual Constitución, con lo que se busca destrabar eventuales modificaciones en caso de que gane el Rechazo. Ahora se esperarán indicaciones hasta el lunes para que pase el martes a la votación en sala.