Resurge riesgo de delitos asociados a préstamos informales "gota a gota"
USURA. En medio de mayor alza de costo de vida, créditos informales acarrean peligros de extorsiones para sus pagos en cuotas diarias.
La imposibilidad de acceder a un préstamo formal, en un contexto de sostenida alza en el costo de vida, se ha instalado como terreno propicio para la expansión de créditos informales con carácter de usura.
Un tipo de delito que puede incorporar extorsión para el pago convenido en ocasiones en cuotas diarias, que determinan el nombre de "gota a gota" de estas operaciones, según expertos vinculados a este tipo de indagatorias. Un tipo de transgresión a la ley que tendría carácter de importado, y que puede incluir intereses de hasta un 100% del monto proporcionado.
De acuerdo a datos de Carabineros en 2019, previo a la pandemia, ya se registraban 42 casos de usura en el país. Un listado que encabezaba aquel año la Región Metropolitana (26), seguida de Valparaíso (6), Los Lagos (4) y el Maule (2). La Región de Antofagasta, durante aquel período registraba un caso con un detenido.
Durante el período de estrictos confinamientos debido a la emergencia sanitaria, estos tipos de préstamos disminuyeron en el país a cuatro y cinco casos en 2020 y 2021, respectivamente. Sin embargo, entre enero y abril de este año, Carabineros ya registraba tres procedimientos policiales por esta causa: Región Metropolitana (2) y Valparaíso (1).
En la ciudad de Antofagasta el capitán y jefe del OS9, Sebastián Soto Muñoz, reconoce una mayor incidencia de estos delitos previo a la actual emergencia sanitaria. "En el año 2019 se registraron bastantes casos de este tipo de delito (a nivel país). Luego fueron bajando debido a la pandemia. Este año, hasta el momento en Antofagasta no registramos casos que hayan sido denunciados. Como una sección que investiga este tipo de delitos, estamos en constante búsqueda de información respecto a la posibilidad de que se concreten este tipo de transgresiones a la ley. En años previos se han conocido casos ocurridos en la comuna de Antofagasta, los que también representan un riesgo tanto para las víctimas como los victimarios", afirma.
"Las víctimas están expuestas día a día a que estas personas (prestamistas), al no recibir un pago, puedan de alguna manera ejercer algún tipo de acción violenta o amenazas con el fin de se les cancele los montos adeudados, que pueden incluir la denominada modalidad 'gota a gota", agrega Soto Muñoz.
Para expertos vinculados a investigaciones policiales, las denuncias corresponderían solo a una fracción de este tipo de delitos, considerando que un alto número de víctimas optaría por no revelar estos casos debido a eventuales represalias.
Según Carabineros, el término usura se aplica a transacciones en que se registran valores a un interés que excede el máximo que la ley permite estipular.
Delitos importados
Según reconoció recientemente el exfiscal regional metropolitano, Manuel Guerra, en los últimos años se registra un aumento de delitos importados que no resultaban habituales en el país, como en el caso de los préstamos "gota a gota". "Otra lógica (de delito) que no teníamos en el país es la lógica del goteo, que es este préstamo que realizan a pequeños comerciantes sujetos cobrando un interés diario. A eso se le llama el goteo. Lo vi en Iquique y también en Santiago. Le prestan a un comerciante un millón de pesos y le dicen $100 mil todos los días o cada 15 días. Si no los paga lo pueden matar o le pueden hacer algo, por ejemplo, destruir el local. Entonces esas lógicas no eran propias de Chile. Hay un aumento de la violencia muy fuerte, con lógicas delictivas que se han ido importando", dijo Guerra, quien también identificó como delitos importados los casos de sicariatos y el de los motoclocks. Este último, un tipo de delito en el que sus perpetradores emplean motocicletas y los cuales en su mayoría han sido identificado como venezolanos.
Guerra, en tanto, reconoce que faltan herramientas para enfrentar la creciente ola delictiva en el país. "Al día de hoy es cada vez mayor el reclamo ciudadano en orden a que existen amplios márgenes para la ejecución de delitos (...) Creo que hay varios fenómenos; primero el Estado con sus recursos no está dando abasto para enfrentar un fenómeno que ha crecido más de lo que se presupuestó. Segundo, no hay una planificación estatal, organizada y transversal para hacerle frente en dos áreas: prevención y represión", añade Guerra.
De acuerdo a los registros de Carabineros, durante 2019 se registraron 41 detenidos por casos de usura en el país. En 2020, en tanto, la institución reporta tres detenidos por esta causa, en 2021 cinco y entre enero y abril pasado se reportan tres detenciones por estas transgresiones a la ley.
"Las víctimas están expuestas día a día a que estas personas (prestamistas), al no recibir un pago, puedan de alguna manera ejercer algún tipo de acción violenta o amenazas con el fin de se les cancele los montos adeudados".
Sebastián Soto Muñoz, Jefe del OS9 de Carabineros