La Iglesia Diocesana celebró a su Patrono San Juan Bautista
EUCARISTÍA. Se presentó el documento de participación en el proceso sinodal.
La celebración de la fiesta patronal de San Juan Bautista y aniversario de la Diócesis dedicada al santo reunió en la eucaristía a la comunidad de fieles de El Loa en el templo catedral de Calama.
Una celebración en la que invitados especiales, sacerdotes, religiosas, diáconos y fieles agradecieron a Dios por este tiempo de peregrinación en el desierto con la misión de anunciar la Buena Nueva de Jesucristo, guiados y animados por el ejemplo de San Juan Bautista.
En este caminar de la Iglesia loína y como fruto de los encuentros de las distintas parroquias y comunidades eclesiales se presentó el documento de participación diocesana en el proceso sinodal y que junto a los aportes de toda la Iglesia chilena, serán parte del documento que se reflexionará en el Sínodo de los Obispos convocado por el Papa Francisco el año 2023.
El obispo Óscar Blanco Martínez que presidió la celebración manifestó que frente a tiempos difíciles por los que atraviesa la humanidad y también la Iglesia, es el ejemplo y los rasgos característicos de la vida san Juan Bautista en el que se encuentran los caminos para responder a estas inquietudes y avanzar y que son; alegría, oración, conversión, de coherencia y valentía.
Estar Alegres por celebrar el nacimiento del santo patrono, al referir el mensaje del ángel Gabriel que anuncia a Zacarías, esposo de Isabel, la madre de Juan diciéndole: "te llenaras de alegría y muchos se alegrarán de su nacimiento" (Lc.1,14). "Alegrémonos por la gran misericordia que Dios ha tenido con nosotros", destacó.
Espiritualidad
Sobre la oración, el pastor de la Iglesia de Calama expresó que en este proceso sinodal que estamos viviendo, no es posible reflexionar sino se está atento a la dimensión espiritual, para ello debemos ser -ministros de la oración- tener presente a todos en la oración, rezar los unos por los otros, porque, "sin comunión con Dios, no puede haber comunión entre nosotros", como planteó el cardenal Mario Grech, secretario general del Sínodo de los Obispos.