Agencias
El Ejército ucraniano expulsó ayer a las tropas rusas más allá del río Séverski Donets, que cruza el Donbás y que es clave para el control de las regiones de todo el este del país, incluido Járkov.
"Entramos en una nueva y larga fase de la guerra. Para vencer debemos planificar detenidamente los recursos, no cometer errores y calcular nuestras fuerzas para que finalmente el enemigo se rinda", dijo el ministro de Defensa ucraniano, Alexéi Réznikov, en un comunicado en Facebook.
La contraofensiva ucraniana parece dar sus primeros frutos, aunque se desconoce si el repliegue ruso es parte de una estrategia para ahorrar fuerzas y lanzar el ataque final contra los bastiones militares ucranianos en la región de Donetsk.
Según informó el ministerio de Defensa, la artillería ucraniana logró detener el avance del enemigo en su intento de cruzar el mencionado río, que tiene más de mil kilómetros de largo.
El Ejército ruso sufrió numerosas pérdidas, ya que sus fuerzas se vieron separadas a ambos márgenes de la vía fluvial, tras lo que tuvieron que retirarse.
En su retirada, los rusos tuvieron que abandonar parte de su equipo y vehículos e incluso algunos de los soldados se vieron obligados a cruzar a nado el río para ponerse a salvo.
En algunas de las imágenes publicadas incluso se puede observar tanques y otros vehículos destruidos junto a puentes provisionales inutilizados en medio del río.
Cuatro días
Los rusos llevaban cuatro días intentando cruzar ese río y en sus intentos, según Kiev, han perdido más de 70 vehículos y dos batallones de infantería con ingenieros.
El repliegue ruso en Járkov fue confirmado por la fuentes ucranianas y occidentales consultadas por el diario "The New York Times".
De consumarse, la retirada sería uno de "los mayores reveses sufridos por Rusia desde su retirada de Kiev el mes pasado", destacó el diario.
Precisamente, en la orilla norte del río se encuentra Izium, ciudad controlada por los rusos desde el mes pasado y que se ha convertido desde entonces en un crucial centro de operaciones del Ejército ruso.
Ubicada a dos horas al sureste de Járkov, Izium es clave para lanzar la ofensiva final en el Donbás, cuya conquista por Rusia se resiste tras 80 días de combates incesantes.
300 bajas Y OTRO BUQUE
Asimismo, el Ejército ruso continúa intentando cercar la principal plaza ucraniana en Lugansk, Severodonetsk, también en la orilla norte del río, para lo que voló el puente que le unía a la localidad de Rubizhne.
El general ruso igor Konashénkov, vocero castrense, informó en su parte vespertino que liquidaron a más de 300 soldados ucranianos en ataques en Járkov y Lugansk.
Por su parte, el jefe de la Administración Militar de la región de Lugansk, Serhii Haidai, señaló que "el puente destruido, que fue el primero en la región de Lugansk en ser reconstruido después de la expulsión de los invasores rusos en 2014, ha provocado que la conexión de transporte entre Sievierodonetsk y Rubizhne ya no exista. Con suerte, esto será por un corto período de tiempo".
El río Séverski Donets, que nace en territorio ruso, sigue su curso al norte de Lugansk y cruza la ciudad de Donetsk para desembocar en el mar de Azov.
A su vez, el ejército ucraniano aseguró ayer que logró hundir otro de los barcos que Rusia mantiene apostados en el mar Negro, cerca de la llamada isla de las Serpientes, tras un ataque de su Armada.
Serhiy Bratchuk, vocero de la Administración Militar Regional de la ciudad de Odesa, en el Mar Negro, anunció la noche del jueves en Telegram que el Vsevolod Bobrov, un buque de apoyo ruso, resultó dañado e incendiado tras un ataque ucraniano.
Azovstal, sin éxito
En tanto, las tropas rusas intentaron nuevamente sin éxito irrumpir en el interior de la planta de Azovstal, en Mariúpol, donde permanece atrincherado y resistiendo un grupo de soldados ucranianos, según informó ayer Petro Andriushchenko, asesor del alcalde de la ciudad. Mientras, Ucrania sigue negociando la evacuación de los médicos y combatientes heridos de la planta metalúrgica.
Finalmente, el Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas de Ucrania reportó ayer que Rusia está enviando artillería adicional a su zona fronteriza del sur, en la región de Briansk, limítrofe con el norte de Ucrania, para ampliar los bombardeos en los asentamientos de Chernígov cercanos a Kiev.
300 bajas ucranianas