Efe/Redacción
Santiago se convirtió ayer en la primera capital latinoamericana en participar en el desafío mundial "Ice Box Challenge", cuyos resultados serán compartidos en la Conferencia sobre el Cambio Climático de la ONU (COP26) que se desarrolla en Glasgow, Reino Unidos.
Se trata de una demostración científica que destaca visualmente los beneficios en materia ambiental del aislamiento térmico de los edificios, a través de dos módulos al aire libre, uno de los cuales posee un estándar alemán llamado "Passivhaus" ("casas pasivas), que se basa en la eficiencia energética; y otro que estará aislado en madera bajo los estándares locales.
De esta manera, cada una de las casetas, instaladas hasta el 11 de noviembre en la Plaza de Armas capitalina, cuenta con un gigantesco bloque de hielo de 1.000 kilogramos en el interior, y se mantendrán a todo sol y a vista del público para que observen como va evolucionando el reto de aislación térmica.
El objetivo del desafío es observar cuánto se derrite cada bloque de hielo al cabo de diez días. De esta forma se podrá comprobar y comparar la real eficiencia energética de cada construcción.
Experimento
"Es imprescindible que la ciudadanía tome conciencia de que hacer bien los edificios puede ser una revolución. Puede servir para cambiar sus vidas y la del planeta", señaló el arquitecto y coordinador de la iniciativa, Marcelo Huenchuñir, quien añadió que el próximo 10 de noviembre, los encargados del proyecto se conectarán con Glasgow (Reino Unido) para compartir los resultados de esta demostración en la COP26.
Huenchuñir, quien además preside el Instituto Latinoamericano Passivhaus (Ilaph), explicó que las "casas pasivas", permiten un ahorro energético de hasta 90% en comparación con las edificaciones típicas, gracias al aprovechamiento de las fuentes de calor internas y a técnicas de enfriamiento pasivo, como el sombreado estratégico, que mantienen una temperatura ideal en las viviendas.
El experto agregó que en nuestro país son muy pocas las viviendas de este tipo, principalmente porque el costo de venta puede llegar a ser de 20% más que una construcción normal.
"Poder replicar construcciones como esta y abaratar sus costos es esencial para frenar los graves problemas de cambio climático que padecemos en nuestro país ", dijo.
Antes de arribar a Chile, la demostración se llevó a cabo en las ciudades de Vancouver, en Canadá; Nueva York y Los Ángeles, en Estados Unidos; Bruselas, en Bélgica; y Viena en Austria, entre otras.
El experimento fue realizado por última vez en agosto en Escocia, donde la "Passivhaus" logró mantener 121 kilogramos de hielo tras dos semanas de reto, mientras que en el hielo en la caseta normal se derritió completamente en ese lapso de tiempo.
Megasequía
Desde hace más de una década nuestro país sufre una megasequía sin precedentes, con una temperatura promedio en los últimos diez años que es la más alta desde 1961. Fines de octubre y noviembre no han sido excepción en Chile y ya se han registrado dos olas de calor en la zona central en las últimas semanas, por lo que el desafío de los bloques será con temperaturas incluso por sobre los 25° durante el día.
Cabe recordar que nuestro país presidió la cumbre climática anterior (COP25), pese a que la cita planetaria tuvo que trasladarse a España debido a la crisis social luego del estallido de octubre de 2019.
1.000 kilogramos
10 tiene cada uno de los dos bloques de hielos que permanecen dentro de las dos casetas aisladas.