Pablo Orellana González
De paso por Calama el director nacional del Servicio Nacional para la Prevención y Rehabilitación del Consumo de Alcohol y Drogas (Senda), Carlos Charme, analizó la realidad local, el trabajo e intervención del organismo en establecimientos educacionales y de cómo además se busca potenciar el mensaje que el organismo considera fundamental entre los escolares de El Loa.
-¿Tiene un matiz especial el venir a una zona donde hay un constante tráfico e internación de drogas al país?
- El consumo de drogas en nuestro país es bastante transversal. No tenemos una gran diferenciación ni por situación geográfica, ni por condición social, ni de género, tampoco por nivel socio económico. Es demasiado grave el problema en todos aquellos factores que menciono. Efectivamente en esta región, en su condición fronteriza que tiene esta región y esta provincia de El Loa, donde circula una gran cantidad de droga, pero más allá de eso el problema es mucho más general. Obviamente vamos a estar donde nos necesitan y acá es muchísimo".
-¿En qué contexto se enmarca su vista y cuál es el mensaje que trae?
-Principalmente para seguir trabajando en torno al plan Elige Vivir sin Drogas, para enfrentar este problema con trabajo en terreno, con un mensaje de apoyo, y también de cobertura en establecimientos educativos. Hay que recordar que de las ocho drogas establecidas como ilícitas, y consumidas en el país, siete de estas son consumidas por jóvenes de entre 13 a 18 años en comparación a los adultos. De hecho la marihuana es consumida por los jóvenes escolares el doble que los adultos y el triple tratándose de la cocaína. Entonces este plan está concentrado especialmente en una matriz escolar, en cómo trabajamos con los jóvenes como foco de nuestra preocupación, y donde toda la comunidad, todo su entorno se preocupa de darles herramientas para poder desenvolver sus mejores potencialidades y acá queremos reforzar ese mensaje y de articulación con todos los organismos pertinentes del Estado y sus vínculos escolares.
-¿Cómo evalúa el trabajo de prevención coordinado con establecimientos educativos locales?
- Principalmente quiero destacar que se trata de un trabajo territorial, efectuando recorridos por varias regiones, monitoreando el trabajo de nuestros profesionales del Senda en cada uno de los territorios donde se ha desplegado este plan Elige Vivir Sano, y por supuesto Calama tiene vital participación, entregando recursos para programas de desarrollo deportivo, cultura, el buen uso del tiempo libre, de cultura, y generar acciones de prevención. Acá en Calama tenemos experiencias positivas con la fundación educacional Obispo Silva Lezaeta y colegio ecológico Montessori. Entonces estamos generando redes y también una oferta de programas para entregar a los más jóvenes para que al momento que deban enfrentar una decisión compleja elijan bien.
-¿Cuánto afectó la pandemia en poder desarrollar estos programas de apoyo en cuanto a la no presencialidad de jóvenes en sus escuelas y liceos?
-Nosotros ante grandes problemas y en la historia humana tenemos dos alternativas. O bajar los brazos y no hacer nada. O hacerle frente. Y ante la pandemia quedamos congelados, primero habiendo una crisis sanitaria y de salud mental. Entonces al no poder efectuar este trabajo preventivo en las aulas, debimos hacerlo en los hogares, a través de los programas de responsabilidad parental positiva, la entrega de guías de autocuidado, y efectivamente eso fue algo paliativo. Hemos tenido lucro cesante, toda la sociedad. Nuestro niños no sólo van a aprender a sumar y restar, leer. Durante un año y medio no hemos podido llegar como queríamos y como teníamos programado nuestro trabajo como Senda, ahí estamos al debe. Y en vez de estar inactivos, estamos tratando de recuperar tiempo perdido.
-¿Y el aumento en el consumo de sustancias ilícitas y alcohol en pandemia cómo lo analizan en el Senda?
-No estoy de acuerdo con ello. Nosotros hicimos dos estudios, en el año 2020 y 2021, la cual fue contestada por más de 75 mil chilenas y chilenos mayores de 18 años, a quienes les preguntamos si había cambiado su patrón de consumo previo a la pandemia, más o menos alcohol y drogas, y la primera respuesta fue que estaban consumiendo menos alcohol, menos anfetaminas, la misma cantidad de marihuana, menos cocaína; y la única droga que se nos disparó fue el consumo de medicamentos sin receta médica.
-¿Y hay foco especial en ese ítem en cuanto al consumo de drogas no prescribidas?
-Hay un foco especial por supuesto. Cuando vemos que la única droga que consumen más son medicamentos sin receta médica, y por otro lado cuando les preguntamos a las personas que habían consumido más alcohol durante la pandemia, que eran menos que la cantidad de personas que estaban consumiendo menos, y les preguntábamos por qué lo estaban haciendo, la respuesta era por motivo psicoemocionales. Si a esto le sumamos este consumo sin prescripción de un profesional de la salud, más lo que ha dicho el Colegio Médico, la Sociedad de Psiquiatría, se nos viene otra crisis, la de la salud mental.
-¿Entonces cómo se re enfoca el trabajo de Senda ante este nuevo escenario?
-Este año y medio no ha sido de total pérdida. Ha sido también de aprendizaje, de cómo llegar a los padres y apoderados, a las comunidades educativas y a la sociedad de forma diferente, de cómo ocupar mejor el tiempo en familia juntos. Será un desafío importante pero vamos a trabajar en ello, sobre todo, y en esto insisto, de forma preventiva. De ahí que es importante el trabajo que articula el Senda con otros organismos del Estado, para abordar una problemática compleja en su conjunto.
-¿Tras esta visita de qué temas tomó apunte, qué materias hay que trabajar?
-Todavía no puedo entregar una evaluación más precisa y concreta. Estamos permanentemente monitoreando las distintas realidades, y la Calama no es la excepción, tenemos más de 200 equipos del Previene en todo el país, los que nos van entregando información importante, retroalimentándose, de dar respuestas a ciertas situaciones complejas y que requieren de nuestra ayuda. Vamos a hacer una reformulación, la más grande de los últimos 20 años al programa Previene, se replanteará, se actualizará, y estas giras nos dan cuenta de ello, las distintas realidades y la necesidad de modernizar constantemente este programa, porque la gente lo necesita.
"Durante un año y medio (pandemia) no hemos podido llegar como queríamos y como teníamos programado".
Carlos Charme, Senda