"Vivimos en una región que es la tierra de los emprendedores"
ANTOFAGASTINIDAD. Gonzalo Yun Sepúlveda, ingeniero comercial y emprendedor.
Nació en Chuquicamata, pero lleva años radicado en Antofagasta. Hizo de esta región su hogar, pese a que por razones de formación profesional habría podido radicarse en otras urbes del mundo o emigrar a la Región Metropolitana. "Esta es una tierra sorprendente y con un espectacular potencial", asegura.
Así resumen Gonzalo Yun Sepúlveda las bondades de esta región. Este ingeniero comercial, que estudió en la Universidad Católica del Norte y es gerente de Endeavor Atacama, recalca que su hogar está entre el desierto y mar.
Gonzalo está en permanente contacto con emprendedores del norte del país, con quienes realiza un trabajo en equipo y colaborativo.
¿Qué recuerdos tiene de su infancia?
-Yo nací en Chuquicamata y viví mi niñez y juventud en ese lugar. Cada vez que puedo vuelvo para allá, y aún tengo familia en Calama, que producto del traslado del campamento debió cambiarse, pero siempre al lado de "Chuqui".
Ahora está radicado en Antofagasta, pero ¿usted le ha tocado visitar y estar en distintos países del mundo?
-Ahora estoy viviendo en Antofagasta, al lado de Chuquicamata, y es una opción de vida el quedarme en esta región que para mí es hermosa y poderosa. Hoy no cambio esta tierra, donde compartes el mar y el desierto con los colores espectaculares de sus cerros.
Es verdad, por mi formación profesional he debido incluso vivir temporalmente en otros países, pero uno siempre vuelve donde están sus orígenes y compromiso con los suyos.
¿En qué sentido está ese compromiso?
-Las cosas pasan por algo. Mi otro hogar es Endeavor, donde trabajamos con emprendedores de alto impacto. A qué me refiero con esto: se trata de trabajar y hablar con emprendedores y hacerles ver que están en una tierra asombrosa y con gran potencial, donde no sólo forman su familia, sino que se desarrollan profesionalmente.
Desde esta región está el potencial para desarrollarse en Chile y en Latinoamérica. Es importante decir que no sólo somos el Silicon Valley de Sudamérica por la minería del cobre, que es el presente; sino que también está la ventana y puerta del futuro con la industria del litio y de las energías no renovables.
¿Cuáles son sus expectativas entonces?
Acá está la industria 4.0 del futuro como lo señalé, y entender y asumir que estamos en una región maravillosa para vivir y desarrollarse. Por eso, mi compromiso como un profesional formado acá, que nació y que hoy sigue en esta ciudad, es aportar en el desarrollo de emprendimientos de alto impacto, que entreguen el crecimiento sustentable que necesita la región para desarrollarla, y que sus beneficios lleguen a todos.
¿Qué le diría a los emprendedores?
Que esta es una tierra de emprendedores, donde están las herramientas para trabajar en forma colaborativa desde el mundo público-privado. Hay gente de esta zona que comenzó con una pequeña empresa vendiendo insumos para la minería en la región, y hoy está exportando a Sudamérica o países líderes mundiales del sector como lo es Australia.
Muchos dicen que esta tierra es adversa por su geografía, pero eso es una oportunidad. Por ejemplo, muchos emprendedores tras la pandemia pudieron convertirse y adaptarse a las nuevas necesidades. Acá hay un enorme potencial y debemos aprovecharlo. Invito a todos los antofagastinos a pensar en grande y confiar en nuestra región, como una fuente de oportunidades tanto de vida como de desarrollo profesional.