Basura espacial: alertan sobre sus riesgos y exigen exploración limpiA
CIENCIA. Agencia europea y oficina especializada de las Naciones Unidas sostuvieron que la presencia de desechos incrementa la posibilidad de colisiones.
Efe
El director de la Agencia Espacial Europea (ESA), Jan Wörner, alertó sobre la "amenaza" que plantea la basura espacial y ha apoyado una exploración sostenible del espacio al anunciar que el organismo informará semanalmente de los riesgos y las soluciones a esos desechos.
Wörner advirtió de que tanto el número cada vez mayor de satélites como el rápido aumento del tráfico espacial supone "una amenaza" para la exploración del espacio, puesto que puede incrementar drásticamente la posibilidad de colisiones.
El director de la ESA recordó que "ha comenzado una nueva era del espacio, en la que se están lanzando al cielo grandes constelaciones de miles de satélites".
"El espacio tiene sus límites", complementó la directora de la Oficina de las Naciones Unidas para Asuntos del Espacio Exterior (Unoosa), Simonetta Di Pippo.
La funcionaria recalcó que los desechos espaciales representan un "riesgo evidente" para la sostenibilidad a largo plazo de las actividades en el espacio.
La ESA ha constatado que la cantidad de desechos espaciales en órbita está aumentando a un ritmo exponencial y que, a medida que cada vez más países comienzan actividades espaciales y conforme sus operaciones de satélites se vuelven más complejas, también aumentan los desafíos que se plantean.
El organismo explicó que las órbitas alrededor de la Tierra en las que se mueven los satélites son un recurso natural limitado y las colisiones accidentales, las explosiones e incluso la destrucción intencionada de satélites han creado millones de fragmentos de escombros que, al orbitar a gran velocidad, pueden dañar o destruir cualquier nave espacial en funcionamiento que se cruce en su camino.
Por ello, los expertos señalan que cada vez es más importante proteger estas regiones orbitales "únicas" y "esenciales".
"La cooperación internacional es fundamental para asegurar que nuestro futuro en el espacio es sostenible", señaló el director de la ESA.
Medidas paliativas
En 2018, la Asamblea General de las Naciones Unidas -que considera la basura espacial como "un tema de preocupación para todas las naciones"-, expresó su inquietud por "la fragilidad" del entorno espacial y el impacto de los desechos espaciales.
Un año más tarde, la ESA amplió su programa de seguridad espacial, que trabaja para comprender el entorno de los desechos, prevenir la creación de más desechos, reducir la cantidad en órbita y disminuir el impacto de las actividades espaciales en la Tierra.
En paralelo, el Comité de las Naciones Unidas sobre la Utilización del Espacio Ultraterrestre con Fines Pacíficos (COPUOS) adoptó las Directrices para la Sostenibilidad a Largo Plazo de las Actividades en el Espacio Ultraterrestre (Directrices LTS), que brindan orientación para ayudar a garantizar la seguridad y uso sostenible del espacio.
Campaña pública
La ESA y la Unoosa anunciaron una campaña de divulgación en la que, durante nueve semanas, informarán sobre los riesgos, las soluciones y la historia de la basura espacial.
A través de nueve infografías y un podcast que publicarán en sus redes sociales y páginas web, concientizarán de la amenaza que suponen los desechos espaciales para continuar viajando al espacio e ilustrarán las soluciones que pueden garantizar una exploración sostenible
El material incluye "cifras fáciles de entender" para que cualquier persona comprenda qué son los desechos espaciales y el desafío que representan ahora y en el futuro.
Las imágenes estarán acompañadas de un podcast en que expertos analizarán la manera en la que se crean los escombros, el riesgo que implican para los humanos, cómo se pueden evitar las colisiones en el espacio y, también, qué tecnologías existen para la mitigación y remoción segura de los escombros.
23.000 objetos se han puesto a orbitar la Tierra desde el inicio de la carrera espacial en 1957, según calcula la agencia europea.
1.200 satélites se encuentran operativos. Los restantes elementos que giran alrededor del planeta se consideran chatarra.