La silenciosa labor de la APS
La pandemia ha visibilizado y puesto en relieve el trabajo que realiza esta rama sanitaria en Chile, muchas veces olvidada y desatendida. En Chile son más de los 70 mil funcionarios que trabajan en esta rama sanitaria, distribuidos en 900 consultorios y 1.600 servicios de urgencias o postas rurales a lo largo del territorio.
Búsqueda de casos, trazabilidad y ahora vacunación son algunas de las tareas que lleva adelante la Atención Primaria de Salud (APS), y que la convierten en un pilar fundamental de la estrategia sanitaria para enfrentar el coronavirus.
Hay que decirlo, sin el trabajo de los funcionarios de esta rama sanitaria, Chile no habría sido capaz de sobrellevar la pandemia con los resultados actuales, que aunque son dolorosos, se alejan bastante de la realidad que muestran otras naciones.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) definió la APS como base esencial para la respuesta global al Covid-19, pues juega un rol central en el objetivo de controlar y contener la transmisión comunitaria.
En nuestro país, desde el inicio de la pandemia los equipos de la Atención Primaria se han desplegado para hacer seguimiento clínico y estudio de contagiados, lo que ha permitido aislar a tiempo a los contagiantes, previniendo males mayores.
En números, dos de cada tres contagios ha sido pesquisado por la APS en el país, un dato que evita la necesidad de más comentarios.
La última de las contribuciones de los trabajadores de la Atención Primaria es el proceso de vacunación que se lleva adelante y que ha sido destacado internacionalmente por su rapidez, orden y cobertura.
Dos y medio millones de personas han sido vacunadas en tres semanas, todo un récord que grafica bien las capacidades de esta red.
De todo lo dicho surge como conclusión que una de las grandes enseñanzas que ha dejado esta pandemia es la importancia de la Atención Primaria como pilar de la estructura sanitaria nacional.
Debe tenerse presente que la APS, a través de sus distintos dispositivos, es el primer eslabón de contacto con la población, y por lo mismo su conocimiento de los territorios no los posee ningún otro servicio.
La crisis actual debe servir para fortalecer esta rama a veces olvidada de la salud nacional, darle un nuevo estatus, dejar una capacidad instalada.
La pandemia es una oportunidad también para mejorar la salud desde su base primordial, que es precisamente la silenciosa y olvidada APS.