Crítica
Y así van pasando los días, y poco a poco el gran escándalo de las compras truchas del señor Intendente a su amigo van quedando atrás.
Lo que hizo don Edgard Blanco, todos sabemos que "se puede, pero no se debe ".
Ya no se escuchan en los medios de comunicación a los parlamentarios pidiendo una exhaustiva investigación, y pidiendo que caiga quien caiga ¡!
Una vez más nuestras noveles autoridades regionales han demostrado que si son expertos en hacer cosas pocas transparentes y echarle tierra rápidamente al asunto.
Así, ante la ciudadanía al ver este triste espectáculo, se les desarma el discurso de que lucharán contra la corrupción, etc.
En la justicia chilena siempre he visto inhabilitarse a jueces cuando conocen o tienen un grado de parentesco en algún asunto que se está juzgando, aquí no se siguió ese camino.
Como decía mi abuelita: " La mujer del César no solo debe serlo, sino también parecerlo "
Hugo Mercado Torres
Participación vs. abstención
A propósito de la escasa representatividad que obtienen algunos, si no la totalidad, de parlamentarios y autoridades que hoy nos "representan", creo vale la pena mejorar lo que hacen varios países, en cuanto a exigir un mínimo de votantes para validar tal o cual elección o plebiscito. Probablemente seamos la única comuna que, con un universo de poco más de 260.000 inscritos en el registro electoral, tengamos, al margen de sus reales competencias, un alcalde que obtuvo poco más de 1.000 votos en la última elección. Cabe destacar que en dicho proceso votaron solamente 66.201 personas (Estadística SERVEL), es decir, hubo una abstención comunal del 75%. Al margen del los significados que le encuentren los "expertos" en la materia, lo cierto es que los fríos números nos señalan que la ciudadanía "no está ni ahí" con los procesos eleccionarios. Pero, al margen de esto último y especialmente pensando en el plebiscito que se aproxima, lo menos que podría exigírsele a la postura ganadora es que cuente, al menos, con el apoyo del 51% del universo de inscritos en los Registros Electorales del país y si se llegase a elaborar una nueva Constitución, la aprobación de la misma debiera ser también del 51% de los inscritos en el Padrón Electoral, por lo menos. No debieran permitir los ciudadanos que otros manipulen su futuro político, social y económico, pero, al parecer, si seguimos la senda ya trazada con las elecciones pasadas, no me cabe duda, que serán otros, los que ya tienen una nueva Constitución preparada, los que definirán el futuro, que yo, personalmente, veo muy obscuro para mi muy querido país.
Rafael Mella Hernández
Retiro del 10%
El senador Araya se refiere en su publientrevista del día lunes 17, al éxito del retiro del 10% de los fondos de pensiones, que administran las AFP. Aprovecha la ocasión para comentar que "no colapsó la economía, no se desplomó la bolsa, no hubo situaciones que afectaran profundamente la economía como algunos auguraron". Todo esto es cierto, y se debe al excelente trabajo de las AFP, que fueron muy hábiles al liquidar activos que no impactaran la caída de los fondos, para lo cual se desprendieron de renta fija nacional, e inversiones en ETF efectuadas en el extranjero, como también a la acertada intervención del Banco Central.
Lo que no mencionó el Senador, es que se echó por tierra el mito de que las AFP se habían robado las platas, y que si una persona fallecía sus fondos se perdían. En efecto, según la encuesta CADEM, subió del 56 al 86% la percepción que los fondos son de los cotizantes, como también subió del 48 al 53%, la idea de que el 6% adicional, vaya en su totalidad a las cuentas individuales de los trabajadores, bajando del 37 al 30%, la idea de que vaya mitad a cuentas individuales, y mitad al fondo de reparto, y por último sólo un 11% quiere que vaya totalmente a reparto.
Al final todos contentos, los cotizantes que pudimos acceder al 10%, los economistas ya que no se cayó el mundo, y las AFP que además de hacer la pega bien, mejoraron su imagen, al caerse el mito de que las platas se las habían embolsado.
Ismael Giménez
Mano dura
En la mayoría de los hechos delictivos que vemos a diario en la prensa o la televisión, siempre hay un extranjero involucrado (le están quitando la pega a los nuestros). Felizmente las autoridades, están tomando las medidas que corresponden. La mano firme hay que ponerla de entrada. Cualquier extranjero que se quiera pasar de listo hay que ponerlo en la cárcel o en la frontera sin miramientos.
Jorge Valenzuela Araya