Valientes madres en la primera línea del combate al coronavirus
SALUD. Profesionales que trabajan con pacientes contagiados contaron sus experiencias.
En todo el mundo el personal de la salud lleva meses librando una batalla contra el coronavirus. Salvando vidas a costa de un alto precio personal y familiar.
En el Día de la Madre, seis funcionarias que trabajan en la primera línea de la atención de pacientes con COVID-19 contaron sus experiencias, donde se mezcla el temor por la amenaza del virus, con la vocación por el servicio a los demás.
Se trata de una tarea que les ha valido reconocimientos y que aún está lejos de terminar, porque la pandemia avanza y nadie tiene certeza de hasta cuándo se extenderá.
El director del Hospital Regional de Antofagasta, Enrique Bastías, destacó el trabajo que está realizando el personal de salud en la región, pese al temor y cansancio que existe.
"Tenemos gente que decidió salir de sus casas e irse a vivir a otro lado, con algún compañero (a) del servicio, para no contagiar a sus familias en el caso eventual de que fuesen a infectarse de coronavirus (…) Sabemos que están cansados, algunos tienen temor, pero la suma y el aguante que tienen, la resiliencia, hace que efectivamente podamos superar esta contingencia", señaló.
Bastías acotó que la batalla es contra un enemigo invisible, que no sólo amenaza al personal de salud, sino que también a sus hijos, padres y parejas.
"No es lo mismo que atender a pacientes en un terremoto u otras pandemias, como el N1H1, la gripe aviar, o el Ébola (…) pero dentro todo, en el hospital hemos sabido organizarnos", dijo el director.