El precio del cobre, luego de once jornadas consecutivas a la baja, cerró la jornada de ayer en US$2,5378 la libra grado A en la Bolsa de Metales de Londres (LME). Repuntando un 0,45% en medio de temores por el coronavirus que afecta, principalmente, a China. Valor que se compara con los US$2,5261 del viernes y los US$2,5496 del jueves.
Minera Escondida decidió retirar el Estudio de Impacto Ambiental por la que solicitaba extraer agua fresca desde la cuenca de Monturaqui.
Así lo confirmaron varias fuentes de gobierno, aunque la compañía operada por BHP, no emitió comentarios.
La minera captaba aproximadamente 1.400 litros de agua fresca por segundo desde ese pozo hasta el pasado 31 de diciembre, fecha en la que venció el permiso.
Desde entonces detuvo la extracción, mientras tramitaba el EIA Proyecto Monturaqui, cuyo objetivo era extraer un caudal promedio máximo de 428 litros por segundo entre los años 2020 y 2030, inclusive.
Pero la minera decidió no avanzar en la iniciativa y desde ahora -aseguraron fuentes consultadas- solo usará agua desalada desde sus dos desaladoras ubicadas en Coloso.
La extracción de agua desde ese sector cordillerano presentaba la oposición de las comunidades atacameñas y de varios sectores políticos como el Consejo Regional, institución que había dado una inédita señal de no seguir entregando más agua a las grandes faenas de producción de cobre, para que avanzaran en el uso de agua de mar.
Paralelamente, el asunto causaba mayor tensión debido a que Zaldívar -la mina operada por Antofagasta Minerals en propiedad con Barrick Gold- también tramita la renovación de su permiso de extracción de agua desde esa zona.
El fondo del problema es garantizar la estabilidad biológica el Salar de Atacama, ya que el agua sacada desde Monturaqui impacta en el sitio. Allí, además de Escondida y Zaldívar, operan las productoras de litio SQM y Albemarle.
Fuentes de gobierno valoraron la decisión de BHP en el entendido que esto significará una mejora en el salar, pero fueron cautos en la señal que podría "mal entenderse".
"Esto no puede ser leído como el resultado de la presión de las comunidades", dijo un personero regional.
Escondida puso en operaciones en 2018 la planta Escondida Water Supply -EWS- en Coloso, la que produce 2.500 litros de agua desalada por segundo. El detalle es que llegará a 3.200 litros, procesos que deberán adelantarse. A ese centro fabril se suma a la desaladora Coloso que provee otros 525 litros por segundo.
Esto es lo que permite a Escondida abandonar el consumo de agua desde la cordillera.
Pero la positiva señal de Escondida, abre una complejidad para Zaldívar.
En este caso, si bien se poseen los permisos de extracción de 500 litros por segundo hasta el año 2025, la vida útil de la mina se estima al año 2029. Por eso la compañía ingresó al SEA tal extensión, lo que se concretaría obteniendo agua subterránea del sector de Negrillar por 212,75 litros de agua por segundo.
El asunto deberá ser zanjado por la autoridad ambiental de la región.
Cochilco informó que para este año proyecta un precio promedio de US$ 2,85 la libra de cobre, lo que implica un alza de 13 centavos de dólar respecto del cierre de 2019 que fue de US$ 2,72 la libra. Mientras que para 2021 también prevé un aumento de la principal exportación, llegando a un valor promedio del commoditie de US$ 2,95 la libra.
El aumento, precisa el estudio "Proyección de consumo de agua en la minería del cobre 2019-2030", responde al crecimiento productivo que tendrá el sector cuprífero en el decenio, en que la estructura productiva se volcará a los sulfuros, que son más intensivos en la utilización de agua, y tendrá menores leyes de mineral, que también demanda más agua por tonelada.
El informe, que establece que al 2030 el consumo nacional de agua de mar aumentará 156% respecto al 2019 (llegando a 11 m3/seg), señala que desde el punto de vista del agua continental, todas las regiones mantienen una tendencia estable para la próxima década. Sin embargo, Antofagasta presenta una disminución para los próximos años, por el uso de agua de mar. A nivel porcentual, se espera que el uso de agua de mar para el 2030 sea de un 65% en la región, lo que equivaldrá a 7,6 m3/seg.
Otras estadísticas detallan que en 2019 el 42,3% (3,9 m3/seg) del agua utilizada por la minería del cobre era de mar. Mientras que en 2020 se espera que ese porcentaje alcance el 44,3% (4,3 m3/seg).
El estudio de Cochilco especifica que en el caso de Antofagasta, las operaciones que actualmente utilizan agua de mar son Minera Escondida, Centinela, Antucoya, Michilla (operativa desde febrero de 2019), Mantos de la Luna, Las Cenizas Taltal, planta J.A. Moreno de Enami y Sierra Gorda.
Por otra parte, existen proyectos que planifican el uso de este recurso, entre los que se encuentran una posible nueva ampliación de la planta desalinizadora de Escondida; la actualización de Esperanza y su posterior extensión de red para abastecer el proyecto Encuentro; la concentradora de El Abra Project y Spence Growth Project, en proceso de puesta en marcha durante 2020. Mientras que la planta desalinizadora del Distrito Norte de Codelco, reinició su licitación, que se extendería por 24 meses.
El informe, que la Comisión realiza todos los años, destaca que el agua de origen continental es un recurso escaso, que no solo es considerado una limitante hidrológica, también se trata, cada vez en mayor grado, de un problema económico que podría restringir el desarrollo de la mayoría de las actividades industriales. De ahí la relevancia de esta investigación.
En ese contexto, la analista de Cochilco, Rosana Brantes, explicó que el alza en el consumo de agua "se debe a causas estructurales como el agotamiento de los minerales lixiviables y por el mayor tratamiento de concentrados lo que requerirá el uso de más agua. También al envejecimiento de las minas, la caída en las leyes minerales, lo que implica mayor mineral a procesar", explicó.
Respecto a la extracción de agua continental, el estudio se refiere a las extracciones provenientes de aguas superficiales como lluvias, escorrentías, embalses superficiales, lagos, ríos y aguas subterráneas, como las alumbradas y acuíferos, y adquiridas a terceros. En segundo lugar, el agua de mar se refiere a aquellas desalinizadas o utilizadas directamente en el proceso (planta de impulsión).
3.900 litros de agua por segundo bombearon del mar las mineras de la región en 2019 según estudios de Cochilco.
M3/seg equivale a mil litros de agua por segundo. En 2019 la gran minería de la región consumió 9,2 m3/seg.
La proyección de la dirección de Estudios y Políticas Públicas de Cochilco, estima que para el año 2030 la minería del cobre consumirá 23.500 litros de agua por segundo (23,5 m³/seg) a nivel nacional, con una tasa de crecimiento anual de 2,7% en promedio. De ese consumo total de la industria, un 47% correspondería a agua de mar y un 53% a agua continental.