La televisión post estallido social: crisis y desafíos para enfrentar el 2020
TV. El fin de programas, salidas de rostros y cambios en las líneas editoriales son parte del panorama.
El estallido social provocó una verdadera crisis en la televisión abierta nacional. Los llamados de "apaga la tele, prende tu mente", o las consignas de "la televisión miente" provocaron un verdadero terremoto que obligó a los noticieros y a los programas en vivo a replantear la forma que estaban haciendo su trabajo.
Se produjo, entonces, una pérdida de credibilidad y un desgaste de las líneas editoriales, pues parecía que no había coherencia entre las necesidades informativas y las exigencias de las audiencias, las que cuestionaron constantemente en redes sociales el tratamiento que la televisión le daba al conflicto.
Los datos duros
Ello se refleja en el Consejo Nacional de Televisión (CNTV), que recibió entre octubre y diciembre 2.190 denuncias. En el primer mes, el noticiero de Mega lideró los reclamos con 43 quejas como que "faltan a la verdad, manipulan la información, conducen las respuestas de las personas hacia lo que quieren mostrar: caos, saqueo y violencia", o "desinforman generando miedo mostrando sólo escenas de incidentes".
Los canales intentaron dar respuesta a lo acontecido, y fue así como fue abriendo los paneles de entrevistados tanto en sus noticieros como matinales a otras expresiones. Pero no siempre con buenos resultados: en noviembre el programa "Bienvenidos" acumuló 698 denuncias por la visita de Hermógenes Pérez de Arce, quien en su intervención rechazó que durante la dictadura chilena se violaran sistemáticamente los Derechos Humanos, provocando que la conductora del espacio -Tonka Tomicic- le pidiera salir del estudio.
La decisión, al igual que los dichos del exdiputado, generó opiniones cruzadas entre aquellos que creían que al invitado se le estaba vulnerando su derecho a la libre expresión y quienes estuvieron de acuerdo con la decisión de sacarlo de pantalla.
El programa, además, se ganó otros 53 reclamos por una intervención del ex ministro de las Culturas Mauricio Rojas, quien comentó que "para reestablecer la seguridad pública, habrá que tomar medidas muy duras, con altos costos, incluso en vidas humanas", lo que fue considerado por los televidentes como una relativización de la vida humana, entre otros.
El golpe ha sido duro. Sumado a las críticas está la baja de avisaje. Sólo entre el 1 y el 13 de noviembre, TVN tuvo una variación de avisos de -69%, CHV de -51 por ciento, Canal 13 con menos 46%, y Mega alcanzó una cifra negativa de 43 puntos porcentuales, según datos de la agencia Dentsu Aegis Network Chile, publicados por Eldinamo.cl.
Esto ha obligado a los canales a reducir costos, incrementando el uso de programas envasados o de bajo presupuesto (ver recuadro). Pero quizás lo que ha sido más notorio para los televidentes tiene que ver con la cancelación de programas, la readecuación de otros, y la renuncia de algunos rostros emblemáticos de cada una de las señales.
La industria se mueve
Entre ellos se encuentra Karol Lucero. El panelista de "Mucho gusto" se convirtió en objeto de protesta durante las primeras semanas del estallido social, lo que provocó que incluso hiciera un video al respecto. El joven prefirió no renovar contrato con Mega, luego de cinco años como parte del matinal.
Sin embargo, el comunicador declaró, a través de sus redes sociales, que a comienzos del año pasado había tomado la decisión de no seguir en el canal para tomar nuevos desafíos, por lo que no lo relacionó con el conflicto.
Sorpresa generó, por otra parte, la salida de Karla Constant, quien renunció a "Mucho gusto" y al canal para buscar proyectos relacionados a lo social. En conversación con LUN, aseguró estar en conversaciones con otro canal pero aún no hay nada confirmado: "Por ahora no puedo decir nada, pero sí puedo decir que el estallido social trajo para mí nuevas propuestas que están más conectadas con eso".
Algo similar sucedió con Mauricio Jürgensen, quien prefirió dar un paso al costado como panelista de "Bienvenidos" tras un año y medio. El periodista viñamarino reveló en "El matinal de los que sobran", programa de streaming que ahora desarrolla junto a Daniel Stingo y Ale Valle, sus motivos: "Hay muchos viejos que se sentaban a decretar el caos reinante, a mí eso me hizo mucho ruido y alimentó mi decisión final de irme".
Otro viñamarino que dejó el matinal -aunque dejó la puerta abierta para volver- fue Martín Cárcamo. Su decisión fue, en parte, por su preparación para el Festival de Viña y a que liderará la versión trasandina de "Bailando por un sueño" y los horarios no eran compatibles. En su lugar, llega Amaro Gómez-Pablos, decisión que refleja la nueva línea que quiere el canal para el espacio, pues el mismo director ejecutivo -Max Luksic- dijo que con ello se buscaba potenciar el enfoque informativo al espacio.
Aspecto por el que también apostó CHV que sacó de pantalla "Viva la pipol", programa conducido por Pamela Díaz, Felipe Vidal y Jean Philippe Creton, para alargar "Contigo en la mañana", espacio encabezado por los periodistas Julio César Rodríguez y Montserrat Álvarez, y que ha sido bien evaluado por el público.
El área de producción tampoco ha estado exenta de cambios, como el despido de Pablo Manríquez y Carolina Romá, productor ejecutivo y editora periodística de "Buenos días a todos" de TVN, programa que recuperó su nombre original durante el estallido social. Dicho espacio, también vivió la renuncia y posterior reincorporación del conductor Ignacio Gutiérrez, tras la salida de Cristián Sánchez quien optó por no renovar su contrato para enfocarse en su familia.
A esto se le suma la reciente desvinculación de Max Collao, periodista que desde el 2017 formaba parte del matinal. "Quiero celebrar la vida porque hoy se acaba de cerrar un ciclo y abrir una tremenda oportunidad", manifestó en su cuenta de Instagram.
En cuanto al término de programas, La Red ha sido el líder indiscutido. Por ejemplo, finalizó "Intrusos", último espacio dedicado a la farándula y que en los últimos días había volcado su enfoque a lo más social. "Nos vamos porque Chile necesita otras cosas", señaló el conductor Michael Roldán en la última emisión del espacio.
En cuanto al late "Así somos", el canal anunció una reestructuración total del espacio que volverá en marzo manteniendo sólo a la animadora Eva Gómez y al personal que trabaja detrás de cámara.
Los desafíos
Para saber realmente cómo afectó el estallido social al desarrollo del trabajo televisivo, se requerirán estudios más extensos en el tiempo. Pero es innegable que la televisión se vio sometida a una exigencia para la cual no estaba preparada.
"La televisión en su conjunto está sumida en un serio problema de reputación e identidad con la sociedad chilena que es grave y que afecta la importancia que tienen los medios para los sistemas democráticos", sostuvo a este Diario Claudio Elórtegui, Doctor en Periodismo y Ciencias Sociales de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV).
Desde su perspectiva éste será un año clave para la televisión, así como para muchas instituciones, pues es la oportunidad de aprender de los errores recientes y también de abrir más espacios a distintos actores. "Tengo esperanza de que vaya surgiendo un espacio natural para la televisión regional, más cercana y creíble, pero tan denostada por el centralismo del país", agregó Elórtegui.
Las nuevas apuestas de los canales
El hecho que Mega anunciara la reposición de la telenovela "Eres mi tesoro" desde el lunes (16.20 horas) , y que TVN hiciera lo propio con la brasileña "José de Egipto" (mañana después de "Hercai"), no es casualidad. Ello porque significa abaratar costos en una industria que, en general, venía con pérdidas desde varios años antes. Es más, el canal nacional tuvo que solicitar al Estado una inyección de recursos, siendo aprobados US$47 millones. Canal 13, por su parte, optó por la externalización de programas que quedan en manos de productoras. Uno de ellos es "Masterchef celebrity", el que entre los confirmados cuenta con El Ranty, La Botota, Ledy Ossandón, Pato Torres, Nacho Pop, Leo Caprile y Rocío Marengo; lo mismo sucede con la nueva apuesta de Cárcamo, que se estrenaría en marzo.
"Tengo esperanza de que vaya surgiendo un espacio natural para la televisión regional, más cercana y creíble, pero tan denostada por el centralismo del país".
Claudio Elórtegui, Doctor en Periodismo y Cs., Sociales de la PUCV.