Matías Jullian Velásquez
Las víctimas del ex sacerdote Fernando Karadima presentaron ayer una querella por el delito de perjurio y falso testimonio en grado de consumado contra el cardenal Francisco Javier Errázuriz.
En la acción judicial, James Hamilton, José Andrés Murillo y Juan Carlos Cruz apuntan al obispo emérito de Santiago como "autor del delito de falso testimonio, en grado de consumado, previsto y sancionado en el artículo 209 del Código Penal".
La acción judicial también está dirigida "contra todos quienes resulten responsables como autores, cómplices o encubridores del mismo delito".
"Acabamos de poner un querella criminal por perjurio y falso testimonio contra el cardenal Francisco Javier Errázuriz. ¡Basta de mentiras y delincuentes!", señaló Cruz a través de las redes sociales.
Audiencia de conciliación
La querella de ayer se suma al recurso de reposición que el abogado que los representa, Juan Pablo Hermosilla, presentó la tarde del miércoles contra la audiencia de conciliación por la demanda contra el Arzobispado, fijada para el 20 de noviembre.
La Novela Sala de la Corte de Apelaciones de Santiago los citó oficialmente en medio de la polémica por la filtración de un supuesto fallo sobre la indemnización demandada por encubrimiento a los abusos cometidos por el ex párroco de El Bosque.
Sin embargo, los querellantes esperan que la conciliación quede sin efecto y buscan que se dicte una sentencia.
Al respecto, el sacerdote Eugenio de la Fuente, víctima de abuso de conciencia, planteó a radio Cooperativa que "no se van a someter a una conciliación que no se abra directamente y absolutamente a la verdad y ellos lo saben. Entonces, la verdad es que me duele, más encima se ha filtrado que, o lo dijo la misma Corte, había acuerdo. Que después de eso, con todo tipo de explicaciones de las máximas autoridades de la Corte de Apelaciones, estén explicando qué pasó, con dimes y diretes, cuesta comprender realmente qué fue lo que ocurrió, no huele bien".
Denunciantes de otros casos también siguen de cerca el avance de este proceso, como Jaime Concha, víctima del caso Maristas, quien confirmó que analizan la posibilidad de una demanda indemnizatoria.
"En el caso del resto de los sobrevivientes, obviamente estas situaciones pretenden amedrentarnos, pero nos refuerzan en nuestra convicción de que tenemos que llegar hasta las últimas consecuencias. A través de las cartas que hemos recibido, reconociendo el daño, pidiendo perdón, tanto a las congregaciones como a las iglesias, creemos que es prueba suficiente como para poder solicitar esa justa y necesaria reparación económica", dijo Concha a Cooperativa.
de noviembre quedó fijada la audiencia de conciliación de las víctimas de Karadima con el Arzobispado. 20