La historia detrás del éxito de Eléctricos Refinerías
PROCESO. En 2013 comenzó el trabajo de Jorge Morales a cargo de un equipo que hoy pelea por el cetro regional.
Este domingo, el fútbol amateur de Calama tendrá una cita distinta. Eléctricos Refinerías, campeón de la asociación Chuquicamata y quien consiguió una brillante clasificación a las semifinales del torneo regional de clubes campeones buscará un logro inédito. Eliminar a uno de los cuadros que durante décadas ha animado el torneo -Deportivo Escondida- y sacar a los antofagastinos de competencia para conseguir un histórico paso a la final.
Pero la historia de "los celestes" de Independencia está lejos de ser una casualidad. Hay un proceso de años, uno que encabeza el técnico Jorge Morales y que empezó por un sueño de fútbol.
"Me fui a probar a Cobreloa, pero no quedé. Y como me gustaba tanto este deporte pensé que el camino era otro y decidí emprender el trabajo de entrenador", dice Morales, quien participó como monitor en la emblemática Escuela Crecer de Calama y luego participó en cursos de formador que impartieron "Los Zorros", con Germán Cornejo a la cabeza en el año 2011.
Y allí, justo cuando fue invitado a jugar al club Eléctricos Refinerías de la asociación Chuquicamata fue cuando vio la oportunidad de concretar su idea. "Llegué cuando el club sacaba tres puntos en la tabla, y sentí que era el mejor lugar para iniciar un proceso. Le pedí a la gente del club que me dejara hacerme cargo de la juvenil y ese año fuimos campeones invictos. Desde allí, ese grupo nunca más se separó", dijo.
El salto
Tras haber ganado tres Supercopas seguidas en juvenil, Eléctricos Refinerías se convirtió en un equipo que lideró el torneo de su asociación, aunque tuvo una mala experiencia en el regional, el mismo que hoy pelea palmo a palmo con los mejores clubes amateurs antofagastinos.
"Recuerdo que nos goleaban pero siempre lo vi como un aprendizaje. Uno que ahora está rindiendo frutos", dice el técnico.
Ese mismo plantel de Eléctricos Refinerías se consagró campeón de su torneo en 2017, venció sin apelaciones en la Copa de Campeones de este año y ahora está dentro del selecto grupo de los cuatro mejores del regional.
"Cuando Cobreloa salía a jugar partidos con los equipos amateurs, una vez nos ganaron pero José Sulantay -ex DT minero- pidió que siguiéramos siendo sus sparrings. Les empatamos un partido y el profe nos felicitaba por cómo lográbamos ser un equipo tan unido pese a ser amateur", cuenta.
La rutina de Eléctricos Refinerías es de entrenar dos veces a la semana en el Polideportivo, además de las mismas sesiones de su selección juvenil. No hay "tercer tiempo" después de los encuentros y muchos jugadores estudian o trabajan durante el resto de los días en que esperan vestirse de corto y representar al club en las canchas de la comuna. Es más, algunos están siendo seguidos por entrenadores profesionales. César Bravo, de la sub 19 de Cobreloa ya se llevó a Erick Fabián, un talentoso volante, además de Luis Leroy y Francisco Cayo. Y Rafael Celedón sumó a Sebastián Ahumada a la sub 17 naranja.
Otros también destacan y quieren construir su historia personal. El colombiano Leader Rivera o el goleador Byron Díaz, son dos de los que van por el máximo logro.
Morales siente que cumplió un ciclo. "Sólo nos queda pendiente ganar lo que estamos jugando ahora. La ilusión nadie nos la puede quitar", dice el joven estratego que luego partirá al INAF porque quiere concretar su más anhelado sueño. Llegar a un club profesional, dirigir en las series cadetes y ser una carta para que algún día, su querido Cobreloa apueste por su talento...
horas de este domingo se juega la primera semifinal ante Escondida en el estadio Independencia. 14
años tiene Jorge Morales, el entrenador que encabeza el grupo de 25 jugadores que va por la final regional. 23