El éxito de Francisca comenzó el 2011 gracias a un fanfic -relatos de fans unsin ánimo de lucro- inspirado en la saga Harry Potter, que fue publicando en foros de fanáticos. Tuvo tanto éxito, que se tradujo al inglés y al italiano. A "El Ocaso de los Altos Elfos" le han seguido "El hada de las cadenas", "Igual a mí, distinto a ti" y "La séptima M", por nombrar algunos. Ahora, y desde marzo en librerías, se suma a esta lista de libros juveniles "Mensajeros".

- ¿Cuando eras de niña te gustaban los libros que leías?

- Poco. Como aprendí a leer sola y leía prácticamente todo el día, obviamente mis exigencias literarias eran inusuales para alguien de mi edad. Salvo honrosas excepciones, me cargaba la literatura infantil que supuestamente debía leer, así que salté a escondidas a la literatura juvenil y adulta muy tempranamente. A los 6 años ya estaba leyendo a Lovecraft, Arthur Conan Doyle, Edgar Alan Poe, Ray Bradbury. La fantasía, el terror y la ciencia ficción me volaron la cabeza, y bueno, hasta hoy.

- Pero escribes libros infantiles y juveniles.

- Fue ya adulta que regresé a husmear la literatura infantil, y al verla con otros ojos ( claramente la oferta había mejorado) me reencanté con el género.

- "Mensajeros" también es infantil, pero habla de la rutina y el miedo a los cambios. ¿Ha sido tu experiencia de vida?

- Durante muchos años fui una mujer con todo muy controlado y poco espacio para las sorpresas. Por lo mismo, el universo se encargaba de despeinarme cada cierto rato, hacerme añicos la rutina y cambiarme el rumbo. Creo que es algo que les pasa a muchos, a cualquier edad, y quise reflejarlo en esta historia. Después de tanto costalazo aprendí la lección, y ahora fluyó no más. Desde que me acomodé a las novedades y los cambios, todo me sale mucho mejor, puedo aprovechar mejor las oportunidades, estoy más consciente de mis herramientas y talentos, y vivo mucho más feliz.

- ¿Qué quieres transmitir con "Mensajeros"?

- No buscaba transmitir una moraleja ni mucho menos, sino que fue consecuencia de cómo se desarrolló la historia. Descubrí el significado cuando la historia estaba lista, nunca lo pensé antes de escribirla. Estamos inmersos en una sociedad cada vez más individualista y antisocial. En los 80 conocíamos a todos nuestros vecinos, nuestros mejores amigos los hacíamos en la calle. Hoy, con suerte nos vemos las caras si las levantamos desde la pantalla del celular. En "Mensajeros" la apatía no la genera ningún tipo de tecnología, pero la sintomatología es la misma. Por eso cualquiera puede reconocerse en el relato y sus personajes. Seríamos mejores personas si estableciéramos mejores relaciones personales, abiertas, honestas, en vivo y en directo, porque es la única manera de desarrollar empatía real. Recuperar los almuerzos, cafés, cocinar con los amigos, apropiarse de los parques, mirarnos a los ojos, dar las gracias, abrazarnos. Se puede.

- En una entrevista que diste hace algún tiempo dijiste que en Internet había mucha leyenda urbana en torno a ti y que no te googleabas desde el 2007. ¿Todavía no te googleas?

- No me googleo jamás. De hecho, si salgo en la prensa generalmente me entero por mi mamá o por algún amigo. Es un tremendo paso de madurez que te deje de preocupar lo que digan de ti, o cómo lo dicen, o si te tergiversan, etc. Me he relajado mucho en ese sentido. Al final la gente cree lo que quiere creer y es poco lo que puedes hacer al respecto, salvo estar muy accesible por si alguien quiere saber más de ti. Mis redes sociales son muy activas y cualquier persona me puede encontrar por ahí y preguntar lo que quiera. Me encanta esa interacción.

- En general, ¿de dónde nace la inspiración para escribir?

- De lo que sea. Donde sea. Cuando sea. Una conversación que escuché en la micro, una noticia en el diario, algo que vi por mi ventana, lo que le pasó a mi mamá ayer. Suelo decirle a mis amigos que todo lo que hacen y dicen es material literario, y nos reímos, pero es la verdad. La vida me regala las novelas, yo simplemente tengo que estar atenta.

- ¿Cómo te definirías?

- Como todo lo que la mitología urbana dice de las pelirrojas: apasionadas, impacientes, fuertes, furiosas, tercas, entusiastas y valientes.

Francisca solar dice que desde niña leyó a conan doyle, bradbury y lovecraft.

Francisca Solar Editorial Planeta 92 págs.

$ 6.990

"Mensajeros"

Por: Magdalena García C.

Francisca Solar ha sabido mezclar muy bien sus pasiones. Por un lado la escritura en papel (con más de 7 libros publicados) y por el otro lado, lo tecnológico y digital. Activa en redes sociales y con más de 21 mil seguidores en Twitter, desde que partió escribiendo Internet ha sido su aliado, pero no su dios. Contesta cada mensaje pero prefiere salir a tomar un café con alguien.

"Durante muchos años fui una mujer con todo muy controlado y poco espacio para las sorpresas", cuenta la autora.

FRANCISCA SOLAR