El Banco Mundial (BM) destacó la cumbre internacional de alto nivel diplomático que comenzó ayer en Viña del Mar: "Iniciativas como la Alianza del Pacífico son pasos en la dirección correcta", sostuvo el economista del BM y coautor del reporte "Mejores vecinos: Hacia una renovación de la integración en América Latina", Samuel Pienknagura.
El documento enfatiza cómo las exportaciones internas son muy bajas comparadas con otras regiones y respalda una "ambiciosa" agenda de integración en la zona.
Mercado externo
Las exportaciones intrarregionales en Latinoamérica corresponden a un 20% del total de la producción destinada por los países hacia otros mercados, muy por debajo del 50% de Asia Oriental, destacó Pienknagura.
El economista señaló que América Latina "tiende a ver mayores beneficios en la integración global que la regional", ya que son países muy diferentes entre sí y con ciclos económicos distintos.
Si se potencia la integración regional, a juicio del especialista del BM, se logrará una mayor competitividad económica en un momento clave, puesto que la región muestra crecimiento negativo desde hace dos años.
Recomendaciones
Para superar esta barrera, el organismo mundial recomendó a los gobiernos una reducción adicional de los aranceles externos, armonizar normas y procedimientos, invertir en infraestructura para disminuir los altos costos comerciales e integrar también los mercados de trabajo y capital.
Además de la Alianza del Pacífico, Pienknagura citó el Mercado Integrado Latinoamericano (MILA), lanzado en 2011, que buscó unificar los mercados de valores de Chile, Colombia, México y Perú.
Jorge Familiar, vicepresidente del BM para América Latina y el Caribe, agregó que "una integración intrarregional más robusta nos volverá más competitivos en el escenario mundial" y permitirá ofrecer "una vía para reactivar el crecimiento económico necesario para disminuir la pobreza y promover la prosperidad compartida".
Sobre los vínculos comerciales de Latinoamérica y China Pienknagura señaló que esta "va a mutar", porque el gigante asiático "se está reorientando hacia la demanda doméstica y menos hacia las exportaciones, y van a cambiar los patrones comerciales ya que además de materias primas va a demandar más manufacturas".