Claudio Bravo logra el trofeo Zamora pese a quedarse en la banca en la última fecha
barcelona. Con sólo 19 goles en contra, el chileno consiguió el premio al arquero más imbatible de la temporada.
Una jornada marcada por la emoción se vivió ayer en el Camp Nou, sede del encuentro entre el FC Barcelona y Deportivo La Coruña por la última fecha de la liga española.
Se esperaba que Claudio Bravo dijera presente en el partido y buscara el último récord por batir en la temporada: ser el segundo arquero menos batido en la historia de la división de honor y superar a Víctor Valdés.
Sin embargo, el DT culé Luis Enrique tomó la determinación de colocar al tercer portero Jordi Masip y a quienes no sumaron minutos durante los partidos del cuadro catalán. La decisión del técnico recibió fuertes críticas en las redes sociales, convirtiéndose en un "trending topic" en Chile.
De todos modos, la ausencia del buinense no empaña el logro principal: obtener el premio Zamora al arquero más imbatible de la temporada. Bravo sólo tuvo 19 goles en contra en 37 partidos, y con un promedio de 0,51 que supera ampliamente al arquero del Valencia, el brasileño Diego Alves.
El capitán de la Roja igualó el cuociente de Abel Resino, meta del Atlético de Madrid que alcanzó dicha cifra en la temporada 1990-1991.
"campions"
Además de levantar la copa de la liga española, el Barcelona dijo adiós a uno de sus grandes valores. Después de 17 años de trayectoria, Xavi Hernández jugó sus últimos minutos con la camiseta del Barça.
Pero la alegría no se quedó solamente en el camarín "culé". El empate por 2-2 dio oxígeno a un Deportivo La Coruña que se salvó del descenso y cuyos hinchas celebraron a la par con los dueños de casa.
Sin embargo, a los "Depor" les tocó sufrir durante todo el partido. Apenas a los cuatro minutos, Lionel Messi decretaría el 1-0 gracias a su combinación con Neymar.
A partir de ese momento, los visitantes debieron desplegar su escuadra defensiva para evitar una goleada. Pero el goleador argentino volvería a anotar y con ello la desesperanza de un equipo que no dejó de buscar la salvación.
Parecía que el Barcelona celebraría el fin de la Liga con un triunfo. Pero la conquista de Lucas Pérez a los 66 minutos, un balón que Masip no alcanzó a retener, equilibraría la historia en el Camp Nou.
Luego vendría la paridad de Diogo Salomao a los 76 minutos, que paralizó tanto a la defensa como al arquero.
A los 85 minutos se decretó un cambio: Xavi abandonó la cancha en medio de los aplausos de la hinchada blaugrana de cara a una nueva historia en el fútbol de Medio Oriente.
El marcador quedó congelado para ambos equipos hasta el final del encuentro y, mientras el Deportivo La Coruña celebraba una salvación que daba por perdida, el Barcelona desató el carnaval para celebrar en casa el título número 23 como "campions" de la Liga.
Restan dos semanas para la gran final de la Champions League que se disputará en el Estadio Olímpico de Berlín. El Barcelona de Bravo -quien estaría en la banca para la ocasión- se encontrará con la Juventus de Arturo Vidal. Ambos elencos irán con la misión de conseguir sus respectivos "tripletes".