Anulan el cobro en Laguna Céjar y sólo recibirá 300 visitantes diarios
Convenio. Ministro de Bienes Nacionales llegó a firmar acuerdo que impone medidas para preservar el ecosistema.
Sólo por un mes se mantuvo el cobro de 30 mil pesos para el ingreso a la Laguna de Céjar, monumento natural altamente atractivo en materia turística y que vivió un excesivo incremento en el precio de entrada, medida que encontró su fin gracias a un convenio firmado entre el Ministerio de Bienes Nacionales y la Comunidad Atacameña de Sólor.
Desde hoy se garantizó el libre acceso a este atractivo turístico a todos sus visitantes, pero también, aquellos que desean experimentar la experiencia de bañarse en la laguna salina deben asumir una serie de responsabilidades previas.
Así lo expresa el documento firmado por la representante de la comunidad que tiene a cargo las dependencias de la laguna, Ana Ramos, y el propio ministro de Bienes Nacionales, Víctor Osorio, quien llegó hasta Céjar para plasmar en el papel la garantía de este derecho que tienen todos los chilenos.
"El Gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet puede comunicar a todo Chile que la Laguna Céjar, que es patrimonio de todas las chilenas y todos los chilenos, hoy día tiene un acceso libre y gratuito garantizado para todas y todos. Eso es categórico", expresó Osorio.
cobros y responsabilidad
Por medio de una mesa de trabajo se determinó el derecho que tienen los herederos de la cultura ancestral que habitó este territorio, quienes además invirtieron en sus dependencias para ofrecer servicios a quienes arriban al lugar, como son los baños, duchas, alimentación, entre otros, y que generan dineros que se destinarán a garantizar la administración y sustentabilidad ambiental y cultural del espacio.
Así como se consagró el ingreso, también quienes lleguen deben cumplir una serie de requisitos que apuntan a preservar para las futuras generaciones este atractivo que a partir de ahora sólo permitirá el ingreso de 300 turistas diarios, los que además deberán registrarse al momento de su ingreso, entregando su domicilio, llegue en forma independiente o por medio de un operador turístico.
Además, será obligatorio que quienes se sumerjan lo hagan en los lugares habilitados para dicha acción, previamente el bañista deberá demostrar que no tienen en su cuerpo ningún tipo de sustancia que afecte el ecosistema, como cremas, protectores solares u otros productos aceitosos que durante años se acumularon en Céjar y Piedra.
"Nuestra misión no es sólo preservar el legado histórico que nos dejaron nuestros ancestros para nuestros hijos, sino que debemos llegar mucho más allá de nietos o bisnietos, en este documento se nos permite velar por el buen comportamiento de los visitantes, queremos que coman en los lugares habilitados, no ingresen con animales de forma indiscriminada, que cada uno se haga responsables de la basura que genera, que sepan que está prohibido la quema de diversos materiales con fines recreativos, como el consumo de alcohol y quienes no quieran acatar este reglamento se les negará su permanencia en el lugar", expresó Ana Ramos, en su condición de presidenta de la Comunidad de Solor.
Otro personero que aplaudió la medida fue el gobernador de El Loa, Claudio Lagos, quien destacó la confianza que le brinda el Estado a la comunidad en su condición de administradores de este recinto y a su vez garantes del cuidado.
"Los turistas ya deben tener en cuenta que este es un sector protegido, con un ecosistema bastante frágil y que es necesaria la mantención del equilibrio por medio de un turismo responsable y esto lo manifestó Ana Ramos, quien también llamó a los operadores turísticos a ser responsables con la labor que desempeñan", expresó el personero.
Con este convenio se pone fin a una polémica que buscaba proteger este sitio turístico, pero hoy también se garantiza un derecho de todos los chilenos como es el libre acceso a las playas, ríos, lagos y lagunas del país con un llamado a la responsabilidad.
Todos los chilenos tienen derecho a acceder a playas de río, mar o lago, desembocaduras de ríos, cascadas o glaciares (considerados todos como bienes nacionales de uso público). Según la ley, los propietarios de terrenos colindantes con playas de mar, ríos o lagos deberán facilitar gratuitamente el acceso a éstos, para fines turísticos y de pesca cuando no existan otras vías o caminos públicos. Por ello las personas afectadas podrán denunciar cuando no se respete esta normativa.