Nuevo hallazgo de geoglifo en la provincia de El Loa: enigmática figura de casi 500 metros
investigación. Imágenes satelitales dejan al descubierto trazado de grandes dimensiones en el Alto El Loa. Alberto Nadgar, dibujante proyectista y aficionado a la fotografía dio con esta imagen y fascinado por su forma y peculiaridad, comenzó a investigar sobre civilizaciones antiguas. ¿Quiénes podrían haber hecho este arduo trabajo? ¿Podrían haber sido los fenicios?... Dos conocedores en la materia dan su opinión sobre este hallazgo.
La afición a la fotografía y su trabajo en geomática en una minera, llevó a Alberto Nadgar a descubrir un geoglifo de grandes dimensiones, el cual no ha cesado de investigar en los dos últimos años.
Tras analizar las imágenes del territorio e identificar el lugar con GPS, en Alto el Loa, lo recorrió a pie para conocer in situ esta estructura. La imagen que se publica en este reportaje es parte de una de las figuras que ha encontrado, la cual más ha llamado su atención. Si bien está cortada por una cañería de agua, se distingue una figura que en terreno, asegura Nadgar, es impresionante.
"El área total es de seis kilómetros por dos kilómetros aproximadamente y esta figura es de más o menos 500 metros. Hay patrones muy marcados, movimientos de gravilla y diferentes colores. Los pequeños triángulos que se ven son rocas acumuladas y si uno llegara a medir la distancia de esta especie de renglones, llegarían a ser equidistantes. Además entre algunas hay cuarzo", dijo Nadgar.
En su afán por encontrar una respuesta a esta figura, comenzó una ferviente búsqueda de información, comparando las manifestaciones realizadas por diversas culturas antiguas. Así es como llegó a la teoría de un contacto transatlántico precolombino, probablemente desde la cultura fenicia (1.200 A.C app.) o de los sumerios (5.000 A.C app.) - basado en investigadores como Ciro H. Gordon, Marshall McKusick, Glen Markoe - que podrían ser los autores de este geoglifo.
Aunque teorías puede haber muchas, Nadgar propone que la forma que se distingue podría ser un rey o bien la representación de un querubín. Ha pasado horas intentando develar este misterio y la simbología presente en la figura le parece muy similar a una de las escrituras más antiguas, la cuneiforme. Incluso sobre la corona de este rey, asegura que lee la palabra "dios".
Patrones similares
Teoría factible
Segunda opinión
Observar las imágenes de este nuevo hallazgo, no le parece insólito y asegura que "es posible que sea extraño para los círculos académicos, porque es una novedad y generalmente somos muy temerosos en poder dar el primer paso de interpretar". Tal como pasó cuando se descubrió el geoglifo del felino -de unos mil 200 años- un culto que no debería sorprender, ya que era propio de las culturas precolombinas de Los Andes.
Según la apreciación personal de Rojas, los geoglifos que en el último tiempo se han encontrado tienen diseños o motivos geométricos, como las mantas y unkus utilizados por los antiguos viajeros del desierto.
Sobre la teoría de la intervención de los fenicios en el desierto, plantea que "teorizar no es una locura, porque es así como avanzan las civilizaciones, pero no veo ninguna conexión con culturas del viejo continente".
Sólo las investigaciones que se puedan realizar en terreno y un análisis acabado de la técnica de construcción y su diseño, podrán dar luces acerca de este enigmático geoglifo, que sin dudas llamará la atención de los estudiosos en la materia.