"Sumak Kawsay, Buen vivir en El Loa", es el nombre que decidieron cinco comunidades atacameñas de la provincia de El Loa, para bautizar a la primera Mesa del Programa Chile Indígena Fase II de Conadi, compromiso que marca el inicio de un trabajo asociativo y territorial en pos de alcanzar el desarrollo y el mejoramiento de la calidad de vida de los comuneros.

En la localidad de Caspana, los dirigentes de estas comunidades -en su mayoría mujeres- se reunieron con los profesionales del Programa Chile Indígena de Conadi, liderados por el Encargado de la Macrozona Norte, Eugenio Contreras Flores, y el titular regional, Fernando Pizarro Agurto, para dialogar y firmar las actas que concretan esta alianza.

Más de 400 familias integrantes de estas comunidades estarán en esta fase, respondiendo a la invitación que se les formuló en la etapa de difusión para promover un trabajo asociativo de desarrollo.

Pablo Orellana G.

Pese a la intención del director regional del Servicio de Vivienda y Urbanismo (Serviu), Rodrigo Saavedra, por explicarles a vecinos de los sectores Nueva Oasis Norte, Independencia Norte, Gladys Marín y Francisco Segovia de Calama, en qué consiste la construcción del barrio transitorio en las inmediaciones de estas cuatro poblaciones, la cita no logró su objetivo luego que las dirigentas convocadas decidieran retirarse de la reunión.

La molestia y las discrepancias entre los vecinos y la autoridad del Serviu, "pasan porque tenemos temor a que nuestros sectores, que ya sufren de problemas serios como la delincuencia y la falta de servicios, empeore con la instalación de un barrio transitorio. Más si se trata de personas que no sabemos si son complicadas o que traerán problemas a nuestros sectores", manifestó Marcela Toledo, dirigenta de la junta de vecinos Renacer de Quetena de la población Gladys Marín.

En el mismo tono y dentro de sus reclamos, Jimena Jofré, presidenta de la junta de vecinos de la población Nueva Oasis Norte, señaló que "es el temor que tenemos a que nuestros sectores se transformen en sitios complicados de convivencia. Ya estamos bastante olvidados por las autoridades como para que sin previo aviso ni trabajo previo se nos instale un barrio transitorio".

Serviu

Sobre esta situación en particular el director regional del Serviu, indicó que "se trataba básicamente de explicarles a los vecinos en qué consiste un barrio transitorio. Que este albergará a 175 familias que calificaron en un proceso que duró cerca de un año. Que contará con seguridad y que quienes lleguen allí deberán respetar serios protocolos de convivencia. Y que también estarán participando de este proceso la subsecretaría de Prevención del Delito junto con Carabineros y la Policía de Investigaciones".

Consultado sobre esta situación de malestar alteraría el futuro de la construcción del barrio transitorio, puntualizó que "deberemos trabajar más y con cada una de las juntas de vecinos que expresaron su descontento y también su inseguridad", la autoridad del Serviu, también agregó que "entendemos el malestar de los vecinos, les hemos ofrecido las instancias para abordar cada situación puntual, pero confío en que comprenderán que no hay nada de qué temer, y por consecuencia tampoco la construcción del barrio transitorio. En eso nos esmeraremos porque las vecinas y vecinos así lo comprendan".

Pese a esto último los dirigentes que participaron de la cita en la gobernación provincial El Loa, aseguraron que llegarán hasta las últimos consecuencias, y que tomarían medidas extremas en caso de que este barrio transitorio avance en su construcción, "estamos dispuestos a llegar hasta las últimas consecuencias si es que esta idea continúa su camino. Y por tal razón no queremos que se construya. Este malestar se hubiera evitado si las autoridades hubiese hecho un trabajo previo", dijo Toledo.