Redacción
Poco más de un año y medio debieron esperar en busca de justicia por la dolorosa muerte de sus hijos.
Sin embargo, lo que ayer escucharon en la sala del Tribunal de Juicio Oral en lo Penal, definitivamente no era lo que ellos pensaban, merecían los asesinos.
Más allá de toda duda razonable, los jueces confirmaron la participación de los tres imputados en la muerte de Aniette Lavia Barraza (27) y Bryan Barrera Fres (29).
Dos de ellos en calidad de autor de homicidio simple y encubridor, mientras que el tercero solo como encubridor de los hechos, al colaborar en el traslado de los cuerpos hasta el sector de Yalquincha.
Los primeros fueron condenados a 12 años por un delito de homicidio simple cada uno, además de cuatro años por ser encubridores respectivamente.
El tercero recibió una condena de 4 años, sin embargo terminó recibiendo una pena remitida de libertad vigilada. Deberá presentarse a un centro de Gendarmería.
"De ahora en adelante que empieza a correr un plazo de 10 días para analizar el fallo, eso será hecho por la Fiscalía y ver si presenta un recurso de nulidad, toda vez que si bien se dictó un veredicto condenatorio, no es por los delitos por los cuáles había acusado el Ministerio Público", explicó el fiscal Marcelo Bravo.
Familia
Las madres de las víctimas estaban en la sala del Tribunal. Tras escuchar la comunicación de sentencia, no pudieron ocultar su desazón, más cuando confirmaron que uno de ellos recobraría la libertad.
"Es terrible el daño que le hicieron a nuestros hijos y que el Tribunal no los acusará por doble homicidio como pedía la Fiscalía. Ellos hicieron mucho daño a nuestra familia y ni un perro merece lo que le hicieron a nuestros hijos", dijo Norma Barraza, madre de Aniette.
Ambas esperan que el Ministerio Público apele al fallo para realizar nuevamente este proceso y conseguir que sean formalizados por doble homicidio.
"Ellos después de los 16 años que estarán en la cárcel volverán a la calle, mi hijo no volverá nunca más a la casa. Lo que aquí pasó es injusto, es cruel y no tiene perdón lo que ellos hicieron", agregó Nora Fres, madre de Bryan.
Junto a un grupo de familiares esperaron la salida no solo de los condenados, sino también del imputado que recobraría la libertad.
En el lugar existió en todo momento resguardo por parte de personal de Carabineros, lo que permitió evitar incidentes entre quienes esperaban al tercero que recobraría su libertad.
Homicidio
Los hechos se registraron durante el mes de diciembre del año 2017, cuando un grupo de amigos festejaba en el población Manuel Rodríguez.
Al interior finalmente dos de los asistentes fueron no solo asesinados, sino que sometidos a reiteradas torturas hasta finalmente matarlos.
Luego intentaron desmembrarlos, sin conseguir su objetivo, para finalmente dejarlos abandonados en el sector de Yalquincha al interior de un tambor y un refrigerador.