Comunidades protestaron por la falta de resguardo de su patrimonio arqueológico
SAN PEDRO. Durante su manifestación acusaron negligencias en el nuevo museo, falta de protección de los sitios patrimoniales y la destrucción del casco histórico.
Integrantes y dirigentes de las comunidades atacameñas de San Pedro de Atacama, recorrieron ayer las principales calles del poblado, en protesta por la falta de protección de los sitios arqueológicos y los vestigios dejados por sus ancestros, la destrucción del casco histórico de la comuna y la situación del nuevo museo.
Dirigentes Atacameños
Sobre la manifestación que fue pacífica y que comenzó en el sector de Vialidad, el presidente de la comunidad indígena de San Pedro de Atacama, David Barrera, dijo que "nos reunimos porque quisimos expresar nuestro profundo malestar y reclamo por las excavaciones que se han realizado sin previa autorización y porque frecuentemente están apareciendo sitios y restos arqueológicos que corresponden al legado del pueblo atacameño".
Barrera agregó que "protestamos porque queremos que el Estado se haga presente y que todo este territorio, y la comuna en general, sea respetado como un sitio arqueológico, ahora y en el tiempo".
Por su parte, la presidenta de la comunidad de Solor y del Consejo de Pueblos Atacameños, Ana Ramos, explicó que "el motivo que convocó la protesta es dejar de manifiesto que necesitamos que las autoridades tomen cartas en el asunto y que efectivamente se haga el reconocimiento arqueológico y patrimonial de nuestro pueblo".
Asimismo, el presidente de la comunidad de Coyo, Juan Álvarez, dijo que "estamos en el proceso de reunirse con el Consejo de Monumentos Nacionales para definir un área de acción, además el museo aún no se puede concretar y en el transitorio no se pueden proteger más cosas. Necesitamos que el Gobierno se haga cargo porque los territorios ancestrales han sido ocupados y seguiremos manifestándonos".
Tierras indígenas
La presidenta de la comunidad de Catarpe, Mirta Solís, en tanto, dijo que las comunidades son muy vulnerables y han perdido parte de sus tierras, aun cuando "los restos de nuestros ancestros y patrimonio arqueológico están ahí. Hay gente que tiene títulos de los terrenos, pero esas tierras siempre fueron indígenas y en los últimos 10 años se ha vendido, se hacen inversiones y tenemos un malestar, un dolor".
Solís añadió que "en todos los terrenos hay vestigios indígenas, arqueológicos y de nuestros ancestros y eso cada vez se respeta menos. Queremos que se reivindiquen las tierras y nos respete la gente que llega de afuera", advirtió.