Johanna González G.
Tras recorrer el sistema público y privado, Giovanna Zambrano (45) perdió uno de sus riñones y debe acudir tres veces a la semana a dializarse, situación que cambió radicalmente su vida.
Hace más de nueve meses que su esposo, Pedro Pereira, comenzó a tramitar la denuncia que espera tener como resultado que los responsables asuman sus acciones, sin embargo, hasta el momento no ha tenido respuestas.
Hecho
En abril del año pasado, Giovanna Zambrano llegó a una clínica particular de Calama con fuertes dolores de cabeza, estómago y vómitos. El primer diagnóstico fue gastritis, pero por la insistencia de su esposo le realizaron más exámenes, los que evidenciaron una insuficiencia renal.
"Me molesté, porque debí pedir más exámenes para saber lo que ella tenía, de lo contrario me la hubiese llevado a la casa para que empeorara. En el lugar me dijeron que no tenían unidad de Cuidados Intermedios, por lo que se le debía derivar al hospital de Calama", contó Pedro Pereira.
Cuando llegaron al Carlos Cisternas no había cama, por lo que debió estar en urgencia y al día siguiente pasó a sala, donde estuvo cuatro días.
"Ella estaba muy hinchada, se veía muy mal. Los doctores le hicieron tratamiento por una insuficiencia renal crónica subaguda y no sabían qué estaba atacando el riñón. Me dijeron que habían decido mandarla a Antofagasta para que le colocaran un catéter y que la ambulancia la estaría esperando para traerla de regreso", detalló.
"Estuvimos como dos horas en urgencia y un médico me dijo que no la devolverían, porque ellos empezarían a tratarla, le pregunté por qué y me dijo 'acá son bien conocidos los calamazos', por lo que no aceptaban el diagnóstico", agregó.
Según aseguró Pereira, estuvo tres días en Urgencia, hasta que pasó a UCI, pero no le colocaron el catéter para su diálisis, sino que fue tratada por lupus por 19 días. "Ella se puso peor, hasta que asumieron que debían hacerle la diálisis y comenzó a mejorar. Estuvo cerca de un mes en ese hospital. Le pidieron una biopsia y me dijeron que se demoraría mucho en tener los resultados, por lo que la llevé a Santiago".
Contó que en la clínica que la recibió le hicieron ese examen, pero además debieron extirparle uno de sus riñones y quedó con diálisis tres veces por semana. Se declaró que su enfermedad era una consecuencia de una hipertensión arterial y que no tenía lupus. "Ahí le salvaron la vida a mi esposa", recalcó Pedro Pereira.
Denuncia
En septiembre del año pasado y por conducto regular, el esposo de Giovanna Zambrano envió todos los antecedentes ante el Consejo Defensa del Estado.
"Me dijeron que era el primer paso para hacer una demanda civil. Me respondieron cuatro meses después y me contestaron a través del mismo hospital Regional", contó.
Al considerar esto insuficiente, en mayo ingresó nuevamente los antecedentes ante este organismo y aún no hay respuesta.
Ssa
Frente a este hecho, el director del Servicio de Salud de Antofagasta (SSA), Zamir Nayar, dijo que "lo que corresponde es realizar una auditoría clínica inmediata, que es la primera y más rápida cuando suceden denuncias, reclamos o este tipo de situaciones".
Precisó que esta familia puede recurrir directamente al SSA a realizar la denuncia. "Es muy relevante que las personas sepan que no están inhabilitadas para recurrir a la máxima autoridad cada vez que ellos lo requirieran".
En tanto, recalcó que tampoco deben haber carencias en la atención, porque "es nuestro deber entregar las prestaciones, ya sea en un centro de mayor complejidad o comprando el servicio. La respuesta que nunca debe existir es que no hay, porque debemos dar cumplimiento a las necesidades de la población".