Proyecto del museo de San Pedro genera molestia entre atacameños
PROBLEMAS. Aseguran que no hubo consulta ni tampoco ceremonias ancestrales. Dicen que los han ignorado.
Una profunda molestia existe en la comunidad atacameña respecto a cómo se ha ido desarrollando el proyecto del nuevo museo arqueológico de San Pedro de Atacama, el que depende de la Universidad Católica del Norte (UCN).
Wenceslao Reyes, miembro de la comisión de Patrimonio del Consejo de Pueblos, aseguró que se han transgredido varias situaciones, como el convenio 169 de la OIT "en cuanto a la consulta que debieron hacer, como también a los ceremoniales para proceder con su embalaje. La propiedad de los antepasados se hizo ver que era muy independiente a nosotros, siendo que son nuestros abuelos".
Dijo que en cierta forma la UCN "se quiso apropiar de nuestros antepasados. Algunos dirigentes atacameños no lo queremos así, porque son los restos de nuestros abuelos, los vestigios de nuestra cultura".
El exdirigente de Coyo, Tomás Vilca, también manifestó su molestia, precisando que desde que comenzó el proyecto plantearon su preocupación por la no aplicación del convenio 169, situación que asegura hasta ahora no se ha realizado.
"Esperamos que la universidad haga un mea culpa con lo que está haciendo respecto a nuestros abuelos, en el sentido que no hayan tomado los resguardos que corresponden, las pericias que debían hacerse, la contratación de una empresa sin experiencia y las consultas a la propietaria, que somos la nación Lickanantay".
Asimismo, argumentó que es un grave error perder la construcción que hizo el padre Gustavo Le Paige con personas del pueblo. "Ese patrimonio debería quedar y no hacer lo mismo como con la escuela, que se derrumbó el edificio y se perdieron los referentes de construcción".
Por su parte, el consejero nacional indígena, Wilson Reyes, apoya la molestia y las exigencias que hacen los comuneros, enfatizando que "estamos cansados de tanta falta de respeto. No nos oponemos al desarrollo, pero creo que debe venir con la conversación y con la autorización de nuestros hermanos atacameños.
En tanto, fue más enfático en recalcar que le preocupa el nivel de inversión, la manipulación de los restos y el rol que tendrá el museo y la UCN. "Por mucho tiempo hemos exigido que nuestro patrimonio debe ser administrado por nuestra gente y la universidad por usufructuado con sus científicos, investigadores y el museo como un tema turístico, pero no con su rol de docencia, investigación y trabajar con la comunidad. Ellos se han portado de mala manera con nuestro patrimonio".
UCn
En tanto, en los comunicados que han enviado desde la universidad explicando los avances, han manifestado que el trabajo ha sido bajo ciertos estándares.
"Luego de 18 meses de una labor que implicó múltiples desafíos técnicos, las piezas patrimoniales fueron ubicadas a aproximadamente un kilómetro de distancia de las antiguas instalaciones, en un espacio propiedad de la UCN especialmente habilitado para resguardar las cerca de 12 mil cajas" .
El recinto temporal fue construido con una infraestructura adecuada a los requerimientos que exige el resguardo de la colección, garantizando su protección durante todo el tiempo que permanezca en el lugar.